Cómo conseguir capital riesgo antes de hacerse viejo

Convertir una idea en realidad puede llevar meses, si no años, pero de poco sirve si no encuentras un inversor que crea en tu empresa tanto como tú. El capital riesgo es una vía recurrente para las nuevas empresas o las posicionadas en sectores poco explotados, pero captar la atención de los inversores no es fácil. Eso sí, hay algunas cosas que puedes hacer para maximizar las posibilidades de conseguir capital fresco y un nuevo socio para compartir la aventura.

1. Generar presión. Muy resumidamente, conseguir financiación es como conseguir ventas, una cuestión de convencer. Con esto en mente, prueba a intentarcambiar el equilibrio de poder a tu favor creando una presión artificial. Todo el esfuerzo para reunir capital se debe hacer trasladando la idea de que estás preparado y de que por cada capitalista de riesgo timorato hay otros dos deseando invertir en tu empresa.

2. Tener un plan. La financiación no es algo que queremos o esperamos. Más bien hay que pensar en la obtención de capital como una batalla y emprenderla con una estrategia en la mano. En el momento en que hayas hecho una buena planificación, tendrás la victoria a la vista.

3. Prepararse bien. Una vez que tienes un plan, hay que preparar a tu equipo para las preguntas que tendréis que responder. Lo primero es estudiar hasta la última sílaba la terminología de la inversión. Lo segundo, tener presentes los diversos hitos por los que ha pasado la empresa. Y en tercer lugar, tener preparados los datos financieros que tradicionalmente acompañan a cada ronda: al menos el detalle de gastos, ingresos y supuestos para los próximos seis trimestres, con explicaciones sobre cómo vais a llegar a los hitos de la siguiente ronda.

4. Divide y vencerás. A la hora de la verdad, los ecosistemas son lugares pequeños y los inversores de capital riesgo están compitiendo entre sí para optar a las mejores ofertas. Usa esto para lograr una ventaja.