La Comisión Europea aprueba un plan para eliminar el roaming
En 2016 deberían desaparecer totalmente los recargos por roaming. Las compañías pueden perder 1.600 millones de euros en ingresos con la nueva legislación.
La Comisión Europea aprobó ayer la propuesta legislativa para obligar a los operadores a eliminar los recargos tarifarios por usar el móvil en el extranjero, tanto para realizar llamadas como para navegar por Internet, a partir de julio de 2014. La intención de la CE es que el roaming desaparezca en el plazo de dos años como mucho.
Con este plan, Bruselas exige a las operadoras que ofrezcan de aquí a julio de 2014 planes tarifarios sin recargos por itinerancia, que cubran al menos 21 países de la UE y el 85% de la población. Aunque la CE reconoce que esto supondrá una pérdida de ingresos de 1.600 millones de euros para las compañías, también señala que estas recuperarán parte de esta cantidad gracias al mayor uso del móvil en el extranjero.
La nueva legislación, que debe ser aprobada por los Gobiernos y el Parlamento Europeo, también prohíbe totalmente a los operadores cobrar por recibir llamadas en el extranjero. En el caso de las líneas fijas, el coste de las llamadas internacionales no podrá ser superior al de las llamadas nacionales de larga distancia.
“Esta propuesta reducirá los precios para los consumidores y hará que Europa sea cada vez más digital”, vaticinó el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso. “La Comisión Europea se opone a los recargos por itinerancia y se declara a favor de la neutralidad de Internet, de la inversión y de la creación de empleos”, declaró por su parte la autora de las propuestas, la comisaria para la Agenda Digital, Neelie Kroes.
Naturalmente, las grandes operadoras europeas, como Telefónica, France Telecom o Deutsche Telekom, se oponen a los planes de la CE. Las operadoras denuncian la considerable reducción de sus ingresos que aparejará la supresión del roaming, informa El Economista. Esto traerá consigo un recorte de las inversiones necesarias para desplegar las nuevas redes de fibra óptica, argumentan las compañías.