Cisco y Schneider Electric, en busca del datacenter sostenible
La colaboración entre los fabricantes ha dado como resultado una mejor eficiencia energética en el centro de datos, premisa fundamental para el ansiado ahorro de costes.
Durante el pasado evento Cisco Live, la compañía Schneider Electric presentó una solución conjunta entre ambas compañías para mejorar la eficiencia energética en diversas infraestructuras.
Para ello se han basado en el servidor de aplicaciones Schneider Electric Torana con la arquitectura EcoStruxure y Cisco EnergyWise. A través de la red inteligente de Cisco, estas soluciones incrementarán el ahorro energético en todo el ámbito de TI del centro de datos y otras instalaciones de las compañías.
“La conjunción de EcoStruxure y de Cisco EnergyWise ha demostrado su valor en la gestión de activos IT y en red en oficinas distribuidas”, afirma Soeren Brogaard Jensen, Vicepresidente de Software Empresarial de Schneider Electric.
En el lado del datacenter, Schneider Electric ha realizado demostraciones de StruxureWare for Data Centers Suite cisco UCS Manager Plug-in. Esta solución proporciona una gestión completa de la infraestructura del CPD y es capaz de aconsejar la correcta colocación de servidores en base al suministro, refrigeración y espacio disponibles. Con ello se consigue optimizar el consumo energético.
Otro caso interesante es el de Schneider Electric PowerChute Network Shutdown integrado con Cisco Unified Communitacions Manager (UCM), diseñado para apagar de forma segura los sistemas en caso de caída del suministro, así como para conseguir un reinicio rápido en el momento de la recuperación.
Por otra parte, las dos compañías también han trabajado para mejorar otras instalaciones como el entramado energético de los edificios de las empresas. La solución, denominada Schneider Electric Convergent Building Infrastructure Solution (CBIS), busca la convergencia de los edificios aportando vías más efectivas durante el despliegue de los cableados. Los fabricantes calculan que los gastos de capital relacionados con la infraestructura TI se pueden reducir hasta en un 22%
