El CIO necesita una visión transversal del negocio, y no ser un “friki”
Analizamos en este encuentro digital la figura del CIO y su necesaria evolución como motor de las organizaciones más allá de la gestión de los sistemas informáticos.
La importancia del factor humano, la necesidad forzada de digitalizar y automatizar procesos, el CIO como impulsor del negocio y orquestador de proyectos, y no como mero responsable de la infraestructura IT o un “friki” de la tecnología; son algunas de las claves más importantes que se ha debatido en el encuentro digital con CIOs organizado por Silicon España y conducido por Mónica Valle, periodista especializada en tecnología y ciberseguridad. El encuentro ha contado con José Tamajón, Director Comercial de Ricoh España y Rafael Luis, Presales Lead de Liferay, como anfitriones del evento, y con 9 responsables de tecnología de empresas y administraciones que han compartido su experiencia el los últimos 12 meses y cómo han vivido este cambio de rol del CIO.
Digitalización forzada por la pandemia
Como era de esperar, empresas y administraciones han tenido que adoptar rápidamente soluciones de digitalización de procesos, o al menos contar con los mínimos recursos para mantener la actividad de trabajadores que ya no pueden acudir a sus puestos presenciales. Algunos ejemplos del trabajo “con mínimos” lo ha dado Miguel Ángel Martínez, responsable TIC del Ministerio de Agricultura, que ha explicado cómo “con cerca de 4.000 empleados, pasar a teletrabajar de un día para otro, es complicado” y tardaron cerca de 15 días en tener resueltos los problemas de acceso a recursos. En el caso de la segunda administración invitada, Javier Fernández Rodríguez, Director de Sector Público, Seguridad y Estrategia Digital del Principado de Asturias, ha asegurado que el teletrabajo no estaba en la línea estratégica pero en dos semanas consiguieron tener más de 20.000 puestos de trabajo en remoto. Para este responsable, los últimos 12 meses han sido una completa revolución y se han conseguido cambios importantes en una administración que es lenta por naturaleza a la hora de adoptar tecnología; pero el reto ahora es saber “si se van a consolidar los cambios cuando regresemos a la normalidad”.
En cuanto a la empresa privada, todos los CIOs coinciden en la generalizada adopción del trabajo remoto, y la gran cantidad de procesos que se han digitalizado, desde la recogida del los datos con sistemas de voz a texto o imagen a texto y automatización mediante sistemas RPA como los que afirma haber introducido Richard Bal, Global Digital Technology Solutions en SGS. Sin embargo, dejando a un lado los niveles de digitalización de cada organización, también coinciden en que el factor humano es una de las claves más importantes para conseguir los cambios, como explica David Marcelino, Director IT de Mazars Group, que asegura que lo más complicado ha sido el acompañamiento a un sector como es el de la abogacía y la auditoría, muy acostumbrado a la presencialidad.
Estos cambios sobrevenidos han sido también atestiguados por los anfitriones del encuentro, que han admitido que sus propias empresas han sufrido estas transformaciones; pero sobre todo de han visto obligadas a trabajar contrarreloj: “hemos montado portales de información sobre el COVID 19 para administraciones públicas en tiempos muy cortos, con tramitadores de oficina virtual, que nos pedían de hoy para hoy”; pero son proyectos que nos han dado un sentido del propósito con la satisfacción de ser capaces de entregarlos con la rapidez requerida y comprobar su utilidad”; explica José Tamajón, Director Comercial de Ricoh.
Para otras organizaciones, como las relacionadas con el turismo y la hostelería, la terrible crisis provocada por la pandemia les ha obligado a redefinir su enfoque y centrase en procesos internos, como señala Daniel Ramos, CIO de Transmediterránea, que asegura que se han enfocado hacia la eficiencia de procesos y en extraer valor del dato. Algo parecido explica Alberto Corredera, CIO de Room Mate Group, que añade el hecho de que haber tenido que cerrar todos sus hoteles les ha servido para acelerar proyectos que estaban en fase de incubación, como una nueva plataforma de fidelización, al tiempo que adoptan soluciones de pago sin contacto o de registro “check-in” online.
El CIO como motor de las organizaciones y no como gestor de sistemas
Si hay algo que muestran con orgullo casi todos los CIOs invitados al encuentro es que su papel como responsables de tecnología es a día de hoy mucho más que el de un mero gestor de la infraestructura tecnológica. El CIO de hoy, explican, es un directivo de negocio que tiene además una visión transversal ya que está implicado en la transformación de todas las áreas de la empresa, desde ventas hasta finanzas, y tiene que tener una visión completa del negocio para alinear sus esfuerzos a éste. Este aspecto lo pone sobre la mesa también David Marcelino, de Mazars que explica que “los líderes de IT estamos en constante cambio, así que estábamos ya preparados para cambiar, y cada vez interlocutamos con más áreas del negocio lo que nos da una visión transversal para ver las debilidades, fortalezas, amenazas del negocio”
Por otro lado, la pandemia ha provocado que los líderes de tecnología no sólo tengan que impulsar o desarrollar proyectos, sino ser capaces de priorizar. Así lo señala Sabrina Cruz, directora de proyectos y tecnología de Grupo ASV que ha apoyado esta capacidad del CIO de conocer la cadena de valor del negocio para ser capaz de priorizar proyectos y alinear la estrategia de la compañía con la estrategia IT.
Algo similar indica Pablo Montoliu, CIO de AON, que cree que hay CIOs que vienen de una época en la que eran gestores IT, y que como directivos, los CIOs deben ser parte del negocio y tener las destrezas de un directivo: “ser CIO no va de ser el más friki y saber más de una tecnología, va del negocio: cuando en una junta directiva se habla de tecnología y sólo habla el director de IT es mala señal”. Por suerte, asegura que ya estamos viendo como en el presente y en el futuro hay cada vez más directores generales que vienen del ámbito de la tecnología y no de la ingeniería o las finanzas como tradicionalmente. Esto mismo lo apoya también Alberto Almajano, CIO de Grupo Induker, que señala que “todo tiene que estar orientado a negocio y no la tecnología” y el factor humano es clave para que los proyectos funcionen: “si no hay un cambio cultual, por mucha tecnología pongas al final te quedas solo con la tecnología”.
Experiencias de usuario y Low Code para el cambio
Para llevar a cabo esta transformación cultural de las organizaciones, los portales de experiencia basados en tecnologías como las de Liferay cobran una importancia clave, porque permiten integrar y unificar servicios. Sin embargo, para incorporar de manera óptima esta tecnología como indica Rafael Luis, presales Lead de Liferay, es importante que estos portales puedan integrarse correctamente con otros elementos de la empresa y ser capaces medir no sólo hacia el exterior sino hacia el interior, como sí puede hacer Liferay gracias a sus herramientas de analítica: “los portales de experiencia tienen que estar en un proceso de mejora continua y tenemos que ser capaces de medir lo que se está utilizando, no hacia el exterior sino hacia el interior”. La facilidad de uso y la posibilidad de desarrollar herramientas y servicios de manera rápida es otro de los elementos clave para todos los CIOs que aseguran que están incorporando cada vez más herramientas “Low Code” y “No Code” (entornos de desarrollo sin apenas código para crear aplicaciones de negocio) para conseguir una mayor agilidad en sus proyectos.
Proveedores: confianza, conocimiento del negocio y relación a largo plazo
El último tema de debate del encuentro, la relación entre empresas, tecnología e integradores, se ha saldado también con una amplia coincidencia entre los responsables de tecnología de empresas y administraciones, que aseguran buscar proveedores “BACA”, acrónimo de “Business Aligned Context Aware” y que significa para David Marcelino, Director IT de Mazars Group, que se conviertan en partners, sean sensibles y se adapten a las circunstancias “más que buscar chispazos a corto plazo”. Para los CIOs es además importante que sus proveedores sean capaces de escuchar, conozcan la cadena de valor del negocio y también entiendan las circunstancias en las que se encuentra en un momento dado la organización, algo que, como asegura Alberto Corredera de Room Mate, una compañía como Ricoh ha cumplido en los 12 años que lleva trabajando con ellos como integrador.