Los avances en robótica no dejan de admirar a la comunidad científica.Hace unos meses nos hacíamos eco de la llegada al mercado de Q.bo, un robot con sabor muy español, y ahora el último adelanto en esta complicada materia se llama Roboy.
Para empezar cuenta con tendones artificiales que reproducen la anatomía de un niño de preciosos ojos azules y 1,20 metros de altura. Además, se mueve de forma natural pese a sus 40 kilos de peso y ha sido programado para realizar tareas domésticas con gran precisión. Por ejemplo, está preparado para limpiar la casa o velar por la seguridad de sus habitantes.
La intención es que su software le permita ser mucho más intuitivo que las propuestas actuales en vez de limitarse a obedecer órdenes.
Pero a Roboy le queda un buen trecho para llegar a ser comercializado en masa, su reto final. Y es que sus creadores todavía siguen trabajando en su construcción y perfeccionamiento, y solicitando donaciones.
Tras imprimirse las piezas del cuerpo y modelar una réplica virtual con todos los movimientos que se le quieren otorgar, este robot humanoide pasará las próximas semanas inmerso en el proceso de ensamblaje. Más adelante se le enseñará a andar.
El pistoletazo de salida del proyecto se dio el pasado junio y terminará en marzo coincidiendo con la celebración de la feria Robots on Tour. Esto es, durará 9 meses exactos, lo mismo que la gestación de un bebé.
A continuación, el vídeo de su presentación:
Qlik detalla las ventajas de las soluciones que están basadas en la inteligencia artificial predictiva…
El uso de la inteligencia artificial, la escasez de talento y el impacto de la…
La compañía de seguridad ESET publica sus predicciones para 2025, en medio de la "innovación…
La aplicación de confianza con la que más se entrometen los ciberdelincuentes es el Protocolo…
Un estudio de IFS, Boom e IDC revela que solamente un 19 % de las…
Para garantizar la privacidad, el 30 % se ha pasado a otra compañía durante el…