CEOs Superman: nombrados para sacar a la compañía del agujero
Ser el nuevo CEO de una compañía a la que le va bien no puede ser fácil: existen varias presiones como la de superar el buen recuerdo dejado por el jefe anterior o mantener el buen ritmo que seguía la firma (véase Tim Cook en Apple). Pero tomar las riendas de una compañía que se encuentra en su peor momento, que parece que ha caído en un agujero del que ya nunca va a salir, tampoco es tarea fácil. ¿Por dónde empezar?
En esa situación se encuentran Meg Whitman, Scott Thompson y Thorsten Heins, CEOs de HP, Yahoo! y RIM respectivamente desde hace unos meses. ¿Cuál es exactamente su función? ¿De verdad han sido nombrados para reconducir a sus compañías hacia el camino del éxito o, más bien, para dirigir un proceso que lleve a una venta de la firma salvando los muebles? Todos ellos parecen convencidos de lo primero y han empezado a tomar medidas. Y las líneas generales son las mismas: reestructuración profunda de altos cargos, recorte de gastos mediante despidos y nuevas estrategias empresariales. ¿Lograrán sacar a sus firmas del pozo?
Meg Whitman: llevando a HP lejos del escándalo
Hewlett-Packard lleva ya unos años en crisis. Tras haber sido líder del mundo gracias a su negocio de PCs, su caída coincidió con dos elecciones de CEOs poco afortunadas. Primero fue Mark Hurd, al que tras cinco exitosos años al frente de HP hubo que despedir en mitad de un escándalo que incluía la gestión irregular de los fondos de la compañía y una acusación por acoso sexual. Tras Hurd llegó Léo Apotheker, que tras unos meses en el cargo dejó a todos boquiabiertos (y a los inversores en pleno ataque de cólera) al anunciar en un mismo día (el fatídico 19 de agosto de 2011) que HP dejaba de fabricar dispositivos para webOS , que había comprado la firma de software Autonomy por 12.000 millones de dólares y que posiblemente se deshiciese de su división de PCs.
HP perdió un 40% de su valor en bolsa durante el año que tuvo a Apotheker de CEO, por lo que su despido no fue ninguna sorpresa. Su sustituta, Meg Whitman, se tomó su tiempo antes de empezar realizar cambios (para pensarlos, aseguró). Finalmente, las decisiones no han hecho más que sucederse: webOS pasó a ser de código abierto, se anunciaron despidos y se unieron las divisones de PC e impresoras en una sola. Y si bien esta última decisión le ha otorgado el favor de la bolsa, la propia Whitman ha dicho que harán falta “años” para devolver a HP al buen camino… ¿tiene la nueva CEO derecho al largo plazo?
Scott Thompson: intentando que Yahoo! vuelva a ser un gigante
Scott Thompson llegó a Yahoo! unos meses después del sonado despido de Carol Bartz para intentar devolver a la compañía a ese puesto que una vez ocupó: el de ser uno de los gigantes de Internet (y dejar de ser lo que es ahora: un dinosaurio). Y es que Yahoo! representa todo lo que era el primer Internet, ese que existía antes de Google y Facebook y Twitter, y es también un ejemplo de compañía que no ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos.
¿Cuál está siendo la estrategia de Thompson a los mandos de Yahoo!? En su caso, no esperó como Meg Whitman para empezar a tomar decisiones. Consciente de la crítica situación de la compañía, Scott Thompson no ha tenido complejos a la hora de iniciar los cambios: adelgazar a la firma a base de despidos (la semana pasada confirmaron 2.000), tomar una actitud más agresiva hacia sus rivales (como su demanda contra Facebook), y reestructurar la actividad de la firma para poner a “los consumidores primero”.
¿Funcionará? Una vez más, tan solo se sabrá con el paso del tiempo, aunque lo cierto es que los escépticos ya aseguran que los predecesores de Scott Thompson en el cargo ya intentaron reformas similares sin ningún éxito.
Thorsten Heins: recogiendo los pedacitos de RIM
La historia de RIM es similar a la de Yahoo!: un día fueron reyes de su mercado, pero este evolucionó y ellas no fueron capaces de reaccionar a tiempo. Thorsten Heins fue nombrado CEO de RIM hace casi tres meses, con la dura labor por delante de hacer él solo lo que los dos co-CEOs anteriores no lograron: conseguir que la BlackBerry vuelva a tener un lugar entre los smartphones o, en su defecto, encontrar otra vía por la que RIM pueda volver al camino del éxito.
Sus comienzos fueron algo desastrosos, declarando que no veía que RIM necesitase mucho cambio, algo que hizo de todo menos calmar a los inversores. No obstante, tras presentar unos resultados peores de lo esperado para el cuarto trimestre de 2011, el nuevo CEO pareció despertar. Tras contradecirse a sí mismo indicando que era necesario “un cambio sustancial”, Heins empezó su sangría de altos cargos: Jim Balsillie, ex-co-CEO de la compañía, deja la directiva. También se van el COO y el CTO. Y Heins dice las palabras mágicas: quizá haya que dejar de intentar tanto ir a por el sector de consumo, saturado por Apple y Android, y concentrarse en el de empresas. Al fin y al cabo, es donde estuvo siempre el éxito de BlackBerry y donde todavía no lo ha perdido todo.
Todos ellos, tanto Meg Whitman, como sobre todo Scott Thompson y Thorsten Heins, trabajan contrarreloj, bajo la mirada escrutadora de los inversores y siempre con una sombra sobre sus cabezas: la de que al final se decida vender la compañía. Eso, por supuesto, no es algo que ninguno de ellos vaya nunca a admitir.