Atraer talento y, sobre todo, retenerlo es uno de los mayores retos a los que se enfrentan las startups durante sus primeros años de vida. Esto se ha vuelto incluso más complejo con el entorno cambiante que ha generado la pandemia. Y no se trata de un tema baladí, ya que en muchos casos el futuro de estas empresas está directamente vinculado con el capital humano.
Para tratar este problema ha surgido la startup Capboard, una plataforma diseñada para gestionar equity, inversores y planes de incentivos en Europa. Esta ha nacido por la iniciativa de los emprendedores Pol Gomà y Marc Jordana.
“A mi vuelta a España trabajé tres años en una startup donde recibí phantom shares conjuntamente con varios centenares de empleados de la compañía, pero nadie le daba importancia porque no entendían cómo funcionaban este tipo de acciones ni tenían visibilidad sobre el valor o las condiciones”, comenta Gomá, que añade que “las startups que conocía tampoco tenían herramientas de gestión de cap table o libro de socios”.
Capboard también permite a las empresas que buscan financiación hacer una simulación de diferentes escenarios de una ronda de inversión, notas convertibles o operaciones de secundario, y compartir los resultados con socios.
Además, esta plataforma que ya utilizan más de 250 empresas facilita la gestión de los abogados, con cálculos automáticos y un repositorio documental para reducir la fricción con sus clientes; a la vez que permite la gestión centralizada de inversores: todos los socios de la empresa tienen visibilidad sobre sus participaciones.
Estos emprendedores defienden que los planes de incentivos están ganando protagonismo como contrapeso a la inflación salarial del sector. Así las phantoms shares y las stock options son modalidades de planes que se usan ya con mucha frecuencia por las startups, consistentes en retribuir al personal clave de la compañía mediante la entrega de valor de la empresa a éstos.
“Hacen a los empleados partícipes del éxito de la empresa, es un complemento salarial que permite a las startups competir con empresas con más recursos por talento con experiencia, y no tiene un impacto fiscal para los empleados hasta el momento de la venta”, destaca. Además, el cofundador de Capboard también adelanta que “con la nueva ley de startups, se prevé que se expanda el uso de los planes de stock options”.
Más allá de permitir a los empleados tener visibilidad total sobre sus phantom shares, stock options o ESOP, o de otras funcionalidades de utilidad para las startups, Capboard ahorra tiempo y errores al equipo de recursos humanos, ya que automatiza el envío de cartas de invitación y consolidación y el control de participaciones disponibles cada vez que entra o sale un empleado.
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