La edición número 15 de Campus Party llega a la mitad de su recorrido. Muchas de las conferencias con los ponentes más destacados como Ferrán Adriá, David Bravo o Andreu Veá ya se han celebrado, pero los talleres y charlas seguirán hasta el fin de semana.
Será un momento en el que muchos abandonen el evento, pero la Campus contará también con nuevos refuerzos. Los campuseros trabajadores que no han podido asistir se sumarán el viernes para disfrutar de las últimas horas, más festivas.
Hasta ahora una de las críticas principales a la nueva disponibilidad de dos “sedes” ha sido la incomodidad de desplazarse entre una y otra y pasar los controles de seguridad. La división entre los hard users (modding y juegos online) del Museo Príncipe Felipe y el resto de áreas situadas en el Ágora, como la de social media o creatividad, habrían disminuido el ambiente tradicional de la Campus, según han indicado algunos asistentes.
Las goteras en este último edificio producidas por la tormenta del martes también estarían causando cierto malestar entre algunos campuseros, que se han visto obligados a tapar sus equipos con plásticos en sus puestos fijos.
Por lo general el modding y la robótica parecen haber decaído en espectacularidad aunque otras áreas como el social media (esta es su segunda Campus) han sufrido un refuerzo notable. También se estaría notando más presencia femenina, con el doble de campuseras que en la edición anterior, según la organización.
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