Cambios en el régimen fiscal del Reino Unido para acabar con la brecha de los grandes de Internet
El gobierno trata de obtener la parte justa de impuestos por los bienes de consumo online.
Compañías como Apple y Amazon dejarán de poder localizar sus servicios en Luxemburgo, como sede europea, para no pagar sus impuestos en el Reino Unido.
“Desde el 1 de enero de 2015 estos servicios se gravarán en el estado miembro en el que se encuentra el consumidor, garantizando una recaudación justa y que ayude a proteger los ingresos”, ha afirmado el ministro de Hacienda del Reino Unido, George Osborne.
El gobierno afronta una serie de cambios legislativos sobre las reglas de tributación de los negocios dentro de la UE y que afectan al suministro del consumo de las telecomunicaciones, la radiodifusión y los servicios electrónicos, según un documento oficial que recoge The Guardian.
Como ya había informado el diario británico con anterioridad, el Reino Unido estaba perdiendo más de 1,6 millones de libras en el IVA de los servicios digitales.
Hasta ahora, las empresas con sede en Luxemburgo, pero que vendían a los clientes en el Reino Unido, podían cobrar las tasas fiscales de Luxemburgo sobre las compras digitales –entre el 3% y el 15%-.
Ahora, los cambios en el régimen fiscal significarán que estas compañías tendrán que cobrar el 20% del IVA del Reino Unido.
Como consecuencia, los consumidores podrán sufrir un aumento de pecios en el coste de los contenidos y aplicaciones online a medida que el gobierno trata de cerrar la brecha que eximía a algunos minoristas de pagar el valor del IVA nacional.