2019 fue un año de cambio para la multinacional británica en nuestro país. Decidió desprenderse de su división de telecomunicaciones y tecnología (adquirida por el fondo de inversión Portobello) para centrarse en los servicios a grandes firmas presentes en distintos países. De esta forma, podía ofrecer un servicio mucho más cercano pero sin dejar de lado su estrategia global.
Fue a partir de ese momento cuando empezó a diseñar unas nuevas oficinas en Madrid, justo con la pandemia comenzando a hacer estragos. Debido a ello, se trata de las primeras instalaciones que han tenido presente desde el primer momento un modelo que está imponiéndose a nivel global, el trabajo híbrido.
Fue ayer cuando BT inauguró estas oficinas, marcadas por unos entornos más diáfanos y “sin despachos para directivos”, pero con más espacios de reunión, tal y como señalaba en rueda de prensa José Luis Gastey, director de Global Manufacturing de BT y máximo responsable de la compañía en la región ibérica. Es así porque la mayor parte de los puestos de trabajo son libres y cada trabajador podrá utilizar el que prefiera en cada momento.
A pesar de deshacerse de la división de telecomunicaciones, la compañía ha seguido operando normalmente en España y centrándose en proporcionar servicios ‘end-to-end‘ junto con sus socios, según nos adelantaba la compañía en 2020.
Además, su objetivo estratégico es crecer en nuestro país, una región de enorme potencial para Joris van Oers, director general de Mercados Internacionales de BT, también presente en el encuentro con los medios.
Van Oers detallaba el portfolio en el que se enfocarán para conseguir ese crecimiento y llegar a nuevos clientes multinacionales: “seguridad, multicloud, conectividad, colaboración y ‘software defined’ serán nuestras prioridades, especialmente en aquellas empresas dedicadas a la Logística, el Retail, la Banca o la Automoción”, puntualizaba.
Actualmente componen la plantilla en nuestro país unos 220 empleados, pero el objetivo en este campo es seguir aumentándola.
Uno de los motores que impulsará la contratación a lo largo del próximo año es el SOC de ciberseguridad (Security Operations Center) que ya estaba operativo en el mismo edificio donde se estrenan las oficinas de BT.
Se trata de un centro con sus propias peculiaridades y que, debido a la seguridad y la exigente normativa en este campo, no permite el acceso al resto de trabajadores de la compañía.
En este SOC (en coordinación con otros 15 centros que BT tiene desplegados a nivel mundial) se libran todas las batallas en las que sus clientes se ven inmersos en materia de ciberseguridad y se detectan diariamente cientos de amenazas. Actualmente cuenta con unos 50 empleados, aunque está preparado para albergar a más de 80 profesionales de la ciberseguridad.
El responsable de este centro nos explicaba durante la visita a las instalaciones que su desarrollo se basa principalmente en dos elementos para poder atender un mayor volumen de ataques en el menor tiempo posible: la inteligencia y la orquestación de todo lo que sucede, algo necesario para poder enfrentarse a amenazas cada vez más sofisticadas.
En definitiva, la inauguración de las nuevas oficinas de BT en España marcarán una nueva etapa en la compañía para crecer, pero con el mismo compromiso hacia sus clientes que han mostrado a lo largo de los 30 años de actividad de la multinacional británica en nuestro país.
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