Bruselas advierte a Microsoft de nuevas medidas formales
La CE no se encuentra satisfecha respecto a las exigencias de interoperabilidad de los servicios y la aplicación de Microsoft Windows sin Media Player.
La Comisión Europea ha advertido al gigante informático Microsoft de que si no cumple su decisión de 2004 tomará medidas formales, que podrían llegar a una multa económica de hasta el 5 por ciento de su cifra de negocios mundial al día.
El presidente de Microsoft, Steve Balmer, ha viajado a Bruselas para encontrarse con la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, a petición propia, según informa el portavoz de ésta, Jonathan Todd. Durante la conversación, la responsable europea expresó que “la Comisión espera que la decisión que adoptó en marzo de 2004 se acate urgentemente y en su integridad”, y añadió que, si no fuera así, “no tendría más remedio que tomar medidas formales para garantizar su cumplimiento”.
“La CE tomó su decisión hace más de un año y espera que se cumpla y a día de hoy todavía no podemos decir que estemos satisfechos por la forma en que Microsoft cumple, en especial, respecto a las exigencias de interoperabilidad de los servicios y la aplicación de Microsoft Windows sin Media Player”, explicó Todd.
La Comisión comenzó a investigar a Microsoft en octubre de 1997 y en agosto de 2000 acusó a la compañía de discriminar la información que permite la interoperabilidad de productos de servidores competidores a conversiones más antiguas de los sistemas operativos Windows.
En marzo de 2004, el Ejecutivo comunitario fijó contra la compañía de Bill Gates la mayor multa de la historia de la UE (497 millones de euros) por abusar de la posición dominante de su sistema operativo Windows, y le impuso como “remedios” la obligación de revelar a sus rivales la información necesaria para que sus productos sean compatibles con Windows, y de comercializar una versión del sistema operativo que no incluya el MediaPlayer.
Después de pagar la multa, Microsoft presentó un recurso ante el Tribunal de Primera Instancia y solicitó la suspensión cautelar de las medidas de acompañamiento hasta que los jueces se pronuncien de forma definitiva. El Tribunal desestimó esta petición al considerar que “los elementos de prueba aportados por Microsoft no son suficientes para demostrar que la ejecución de las medidas correctoras impuestas por la Comisión pueden causarle un perjuicio grave e irreparable”.