HPE inventa la máquina expendedora del VM empaquetado
Los tiempos modernos traen una nueva manera de gestionar la informática más democratizada: sistemas hiperconvergentes que unifican en una sola plataforma servidores, almacenamiento, redes y nube.
Hewlett Packard Enterprise, en colaboración con Intel, tiene programados una serie de webminars “bajo demanda” en los que se explica los beneficios que trae la llamada hiperconvergencia, la “tormenta perfecta” que se produce con la integración entre la nube como escenario, la virtualización de las máquinas y los sistemas definidos por software.
Los sistemas hiperconvergentes son una reciente innovación informática que por primera vez es capaz de aunar e integrar diversos mundos hasta ahora separados en un entorno común, gracias a que las tecnologías subyacentes son básicamente las mismas, y en esto Intel tiene mucha parte “de culpa”. Capacidad de computación con chips in-memory, almacenamiento escalable con discos SSD y flash, redes definidas por software… en concreto, colocar inteligencia en cada punto para hacer más sencilla y fiable el funcionamiento de los sistemas.
¿Cómo funciona? Imagínese una máquina de vending capaz de suministrar infraestructura bajo demanda, seleccionando en el cuadro de mando su amplitud, localización, calendario de funcionamiento… y cuando esté todo ajustado y programado, darle al botón y pagar en función de lo escogido. Un control para la gestión de extremo a extremo que permite no solo reducir los tiempos de despliegue, sino que también capacitar a perfiles técnico sin demandar un profundo conocimiento. “Sencillas e innovadoras, las soluciones de virtualización todo-en-uno integran computación, almacenamiento definido por software e inteligencia definida por software para que pueda implementar máquinas virtuales a la velocidad de la nube, simplificar las operaciones de TI y reducir los costes”.
HPE ha logrado paquetizar en sus nuevos Hyper Converged Systems la experiencia de usuario inspirada en un consumidor final de informática de consuno. O sea, que se facilita al extremo la gestión con suficientes conocimientos generalistas en ordenadores y manejo de redes, apostando por un interfaz moderno y limpio, el HC380 Management UI. De tal manera, que se permite “implementar máquinas virtuales en solo cinco clics, actualizar hardware y software en solo tres clics, y proporcionan diagnóstico y análisis instantáneos para permitir una respuesta más rápida a las necesidades empresariales”.
HPE pone en el mercado diversas opciones para ajustarse mejor a las necesidades iniciales de cada proyecto. Así, están el HPE Hyper Converged 380 y el 250, basados en los servidores HPE ProLiant DL Gen8 y Gen9 o HPE BladeSystem . El ProLiant DL380 es actualmente el servidor más vendido del mundo, que proporciona una arquitectura probada multipropósito para virtualización en general, incluidos cloud computing y virtual desktop infrastructure (VDI).
Estos dispositivos preconfigurados pueden abarcar desde una máquina virtual stand-alone de uso específico hasta sistemas en rack para usos más generales. Así, se comienza con una mínima configuración de dos nodos (desde 24 cores, 256 GB de memoria y 3 TB de almacenamiento) en chasis 2U basados en Apollo con hasta 4 blades, que puede escalar a los 16 nodos (hasta 576 cores, 24 TB de memoria y 194 TB de almacenamiento). Y con la flexibilidad de poder agregar hasta 24 discos por nodo (siempre en bloques de ocho discos), que pueden ser solo SAS, SSD por niveles, incluso una oferta todo-flash, o una solución mixta. La principal diferencia entre los primeros Hyper Converged 250 y esta tercera hornada de los 380 es que ya admiten tarjetas gráficas para los puestos VDI (en concreto hasta dos nVidia Grid por nodo).
A la velocidad de la nube
En cualquier caso y dicho muy resumidamente, su potencia permite dotar al negocio de una velocidad de nube, simplificar las operaciones de TI y reducir costos. ¿Qué significa implementar máquinas virtuales a la velocidad de la nube? Pues que con apenas cinco clics se pueda “levantar” nuevas máquinas con la capacidad deseada, estando disponibles y en pleno funcionamiento a los quince minutos. Y de tal manera simplificada, que lo puede hacer un perfil generalista en lugar de varios especialistas. “Una persona y tres minutos en comparación con hasta tres semanas necesarias para poner en marcha un nuevo servicio de infraestructura tradicional”.
Así, las actualizaciones del firmware y las controladoras se hacen “en tres clics”, lográndose una gestión del ciclo de vida federada al permanecer toda la infraestructura de datos integrada. Esto permite la movilidad de datos a lo largo de sistemas, sitios y nube dentro de un margen de disponibilidad continua de “cinco nueves” (99,999%), lo que significa un parón programado de sólo cinco minutos al año para puesta a punto.
En la misma medida que se incrementa la facilidad de uso, se reducen los costes de funcionamiento. El coste inicial (CAPEX) es mínimo al permitirse una configuración básica con entrada de dos nodos y escalado lineal, suprimiendo directamente los costes de sobre-aprovisionamiento y obsolescencia. Los costes en recuperación en caso de desastre son un 62% menos. Y además es un modelo de capacidad flexible de pago según crezcan o se reduzcan las necesidades operativas (OPEX).
Los HPE Hyper Converged ayudan de verdad a transformar los entornos TI con una arquitectura probada para la virtualización, y con una solución que integra computación, almacenamiento, actualizaciones simplificadas y niveles de servicio mejorados.
Como se dijo, una modalidad está basada en los servidores ProLiant DL380 equipados con procesadores de Intel, software de virtualización VMware y software de consola HPE como OneView, con el que poder simplificar drásticamente la gestión de la infraestructura diaria y automatizar las tareas manuales (actualizaciones de firmware, drivers, parches) que consumen mucho tiempo tanto en nubes privadas como en las híbridas.
La otra modalidad basada en ProLiant DL250, igualmente equipados con procesadores de Intel, son equipos integrados previamente y construidos especialmente para implementar máquinas virtuales con la densidad óptima. Se incluye la opción de elegir VMware vSphere para la gestión de las máquinas virtualizadas para una utilización máxima, o añadir resistencia y servicios de nube integrados con Microsoft Cloud Platform System Standard para ofrecer la carga de trabajo adecuada para su entorno.
La hiperconvergencia está de moda
Basados en la gestión de HPE OneView, HPE Hyper Converged Systems proporciona la base de una ruta hacia la “composable infrastructure”: el centro de datos del futuro definido por software que implementa recursos de TI según sea necesario. Un centro de datos propio y seguro, basado en este nuevo enfoque de la arquitectura como código (esto es, 100% programable), que permite implementar recursos de TI según sea necesario, rápidamente y para cualquier carga de trabajo, y en especial respaldar el desarrollo de nuevas iniciativas empresariales disruptivas.
Descendiendo un poco más en el funcionamiento técnico, el sistema de basa en una API unificada con potentes herramientas del ecosistema de partners de HP que combina inteligencia definida por software, asegurando la cantidad adecuada de computación, almacenamiento y estructura en cada momento. Esto es más fácil de adoptar para nuevas empresas, start-ups, y pymes que no dispongan de departamento de sistemas propio. Sin embargo, allí donde exista, se encuentra con un dilema: abandonar el entorno operativo tradicional, o adoptar el modelo de una economía de las ideas y afrontar con energía la “uberización” de los mercados.
La API unificada de Composable Infrastructure de HPE permite abordar las necesidades de aprovisionamiento y gestión de servidores, almacenamiento, redes y nube. Así, junto a HPE Helion CloudSystem, la API permite optimizar los recursos según las necesidades de carga de trabajo, mejorando el rendimiento de las aplicaciones y reduciendo el sobredimensionamiento.
O el aprovisionamiento de almacenamiento flexible, sea compartido o de acceso directo DAS (Direct Attached Storage), definido por plantillas, con control y agilidad instantáneos que mejoran la eficiencia, eliminando las barreras físicas con grupos de recursos virtuales para cualquier tipo de aplicación o datos.
Composable se basa en modelos de redes como SDN definidas por software, estructuras de Ethernet y desagregación de conmutación. La API permite definir la transmisión de decisiones de tráfico programáticamente y disociarla del hardware y de las interfaces operativas, aumentando la agilidad empresarial y de su network.
Por eso, las aplicaciones para la TI tradicional, diseñadas sobre modelos comerciales de tipo “hágalo usted mismo” (DIY) y a veces basadas en décadas de arquitectura, están demasiado encorsetadas en respaldar los procesos empresariales existentes, como colaboración o procesamiento de datos. Por el hecho de estar basadas en las operaciones establecidas, se vuelve muy complicado reutilizarlas para lanzar nuevos proyectos, especialmente pilotos de ciclo corto que pueden llevar implícito el fracaso (o más bien el no acierto a la primera); y además existen solo por el coste que respaldan, no suelen contar con presupuestos extra para I+D+i.
Del otro lado, están las aplicaciones para la economía de las ideas, diseñadas para aumentar los ingresos con nuevos productos o servicios, y generar nuevas experiencias de cliente aprovechando las tecnologías mobile first, big data y delivery continuous. Las aplicaciones requieren baja latencia y adaptación continua a altos niveles de incertidumbre y cambio: ágiles, no lineales y de alta velocidad. Es en este escenario donde la hiperconvergencia se desenvuelve con total naturalidad. Con una API única compatible con DevOps se pueden desarrollar más aplicaciones, más rápidamente, y sustituir hasta 500 llamadas y 50 horas de integración con terceros.
Si hacemos caso a lo que dicen los analistas, todos aplauden este tipo de arquitectura, donde una infraestructura soporta todas las aplicaciones, y sigue lista para su reutilización sea cual sea la capacidad de carga de trabajo necesaria, y solo justo cuando lo necesite. Así, Forrester dice que la Composable Infrastructure es una base de hardware para agilidad extrema. Frost & Sullivan señala cómo la infraestructura adecuada puede preparar el centro de datos para los disruptores de negocio. E IDC destaca que se crea un puente a la tercera plataforma con HPE Composable Infrastructure.
HPE ha desarrollado desde cero la primera plataforma del mundo diseñada específicamente para Composable Infrastructure, llamada HPE Synergy, “ofreciendo una experiencia que capacita a la organización de TI para crear y entregar nuevo valor de forma instantánea y continuada. Se trata de una infraestructura única que reduce la complejidad operativa para cargas de trabajo tradicionales y mejora la velocidad operativa para la nueva clase de aplicaciones y servicios”. Si quiere saber más sobre este tema y cómo la hiperconvergencia puede ayudar a su negocio, no deje de solicitar un pase privado a uno de los webseminar on-demand de HPE.