Cómo beneficiarte de una red privada virtual
Soluciones como la que ofrece Surfshark permiten navegar por internet de forma anónima y segura.
Internet es uno de los grandes inventos del siglo XX, que está cambiando la forma de informarnos, de relacionarnos, de aprender y de trabajar en el siglo XXI. La Organización de las Naciones Unidas reconoce el acceso a esta herramienta como un derecho humano. Y, en condiciones adversas o de especial necesidad, ese acceso se pude impulsar con las funciones de la VPN.
Ahora un comerciante puede atender clientes de cualquier parte del mundo y tramitar sus pedidos sin haberlos visto nunca físicamente. La información sobre un acontecimiento acaecido en un pueblo remoto llegará a los oídos de ciudadanos de otros continentes en tiempo real, no solo por los medios tradicionales, sino a través de redes sociales y por boca de los propios usuarios. Las empresas son capaces de reunir empleados desperdigados por diferentes oficinas con una simple videollamada. Un individuo puede consultar su registro bancario desde el móvil. Y cientos de libros, películas y demás contenido de entretenimiento, o incluso cursos de formación, se encuentran a un solo clic de distancia.
Son muchas las posibilidades que se abren ante nosotros con el mundo online. Pero para sacar pleno rendimiento a internet y que el acceso a sus recursos resulte efectivo, además de sencillo y económico, tiene que ser seguro y completo. Una VPN (red privada virtual) es la solución ideal para que la libertad de navegación supere los límites de la censura y para que la protección sea instantánea.
Todas las formas en las que una VPN te puede ayudar
La instalación de una VPN permite, en primer lugar, proteger la identidad de quien navega por la Red y ver contenido de forma privada, en modo camuflaje. La tecnología de red privada virtual otorga el poder del anonimato a los usuarios. Como efecto inmediato, podrás evitar que las páginas realicen rastreos indeseados, siguiendo y registrando cada paso que das con la intención de sacar rédito comercial a tu costa. Aunque lo intenten, no serán capaces de identificar tu ubicación a través de la dirección IP porque no dejarás huellas.
Una VPN bloquea los molestos anuncios para que la experiencia sea limpia y elude la acción de terceros, como los ciberdelincuentes, para que no roben información de valor con sus ataques. De hecho, una de las mejores formas en las que puedes utilizar este tipo de redes es blindando operaciones delicadas, del calibre de las transacciones monetarias, en las que intercambias datos especialmente valiosos como tu número de cuenta y datos de las tarjetas bancarias. Y es que la VPN facilita conexiones con la banca online, gestiones con criptodivisas y las compras por internet.
Otro caso de uso típico es el envío de correos electrónicos de trabajo, cuya intercepción es un riesgo que nadie quiere correr. O, por qué no, el fortalecimiento de actividades como el juego frente al doxing o el swatting.
Para mantener todo bajo control, las soluciones de VPN emplean cifrado de extremo a extremo y otras medidas de protección como filtros de malware o antiphishing. Se trata de tecnología que ayuda a enviar y recibir tráfico de internet sobre una red pública, al alcance de todos, en cualquier momento y lugar, con las mismas garantías que una red privada.
Cuando no hay posibilidad de acceder a internet desde una conexión segura y solo está disponible una wifi pública, contar con una VPN mantendrá a los piratas informáticos a raya. Su instalación también te servirá para saltarte la censura o los geobloqueos en aquellos países en los que se restringe cierto contenido y se limita el acceso a determinadas plataformas. Una aplicación directa de esto es la posibilidad de visualizar programas de entretenimiento si viajas al extranjero. Internet cumple así, con el impulso de la red privada virtual, con su objetivo de ser una plataforma de conocimiento abierta.
Consultar cuáles son los precios en distintos países, conectándote desde diferentes lugares, a la hora de adquirir billetes de avión, de reservar la habitación de un hotel o de tantear vehículos de alquiler es otra cosa que puedes hacer gracias a las funciones de la VPN. Esto sirve para dar con la mejor oferta posible de entre todas las que existen.
La privacidad es realmente importante y, con soluciones como la que ofrece Surfshark, disfrutarás de cargas y descargas seguras de archivos P2P. Unas cargas y descargas que, además, no entorpecerán el rendimiento o la velocidad final. Asimismo, podrás reproducir contenido en alta definición y formato streaming en tiempo real, como partidos de eventos deportivos en los que el movimiento de sus participantes es contante, sin esperas por el almacenamiento en búfer ni ventanas emergentes.
Una buena VPN también debería aportarte una red de protección en caso de perderse la conexión, llevar sus capacidades a diferentes tipos de dispositivos de manera simultánea y garantizarte una asistencia profesional las 24 horas del día. De este modo, te beneficiarás de sus ventajas y de las de un internet más puro y seguro.