Box Shuttle, el nuevo servicio para grandes volúmenes de archivos de Box

Box Shuttle ayuda a las empresas a pasar millones o incluso cientos de millones de archivos heredados a los servidores de Box en la nube.

Box ha anunciado la puesta en marcha de Box Shuttle, un nuevo servicio que combina software y consultoría para ayudar a los clientes a pasar grandes volúmenes -de millones o incluso cientos de millones- de archivos heredados a los servidores de Box en la nube. Box Shuttle estará disponible en beta a partir de hoy y se espera que se lance a nivel comercial este otoño.

Anteriormente, las empresas con los archivos almacenados en recursos compartidos de red o sistemas de gestión de contenido antiguo como Microsoft SharePoint, EMC Documentum o OpenText tenían que encargarse por sí mismas de subir el contenido más antiguo a Box. Esto demostró ser un problema, dado que no había permisos de uso, metadatos, políticas de retención y otros atributos personalizados para mover los archivos, y éstos no siempre se asignaban de manera lógica porque ninguno de los sistemas de gestión de contenido funciona de la misma manera.

Box observó el problema y se decidió a crear Box Shuttle. Este producto híbrido entre software y consultor de datos humano busca ayudar a las empresas a hacer frente a la miríada de problemas relacionados con la planificación de la migración y la organización del sistema de archivos, que podrían desarrollarse al mover grandes volúmenes de archivos a la vez.

Box ha estado trabajando con clientes como Toyota y una gran empresa de servicios financieros para ayudar a definir el nuevo servicio. Box Shuttle tendrá múltiples niveles de precios en función del nivel de complejidad del proyecto.

El producto tiene el potencial de proporcionar un servicio útil a los clientes que buscan mover grandes contenidos a la nube, mientras ayuda a Box a extender su relación con las empresas de gran tamaño y reducir la dependencia de los competidores de gestión de contenidos premium. El CEO de Box, Aaron Levie, declaró a TechCrunch que “en tres o cinco años, literalmente no habrá razón para que los clientes tengan que mantener sus propios centros de datos o servidores de archivos”.