Blackberry, de ejecutivos a niños
RIM necesitaba un cambio de estrategia y lo encontró ampliando sus miras. De perseguir a un público objetivo más elitista, profesional y empresarial la firma canadiense ha pasado a establecerse en el mercado de consumo general, con buenas cifras de ventas y un incremento en el número de abonados gracias al éxito su modelo Storm.
No hay duda de que la Blackberry ha conseguido entrar de lleno en las familias y el ámbito doméstico. Sirva como ejemplo lo sucedido a los co-jefes ejecutivos Jim Balsillie y Mike Lazaridis recientemente, durante una reunión general de accionistas. Un niño, probablemente hijo de alguno de los asistentes, preguntó literalmente a los CEOs cuándo harían un teléfono para chavales que su madre le dejara tener, según recoge Reuters.
Lazaridis, de forma simpática, pero ciertamente reveladora, respondió: “Hay muchas oportunidades y ya sabes, si las Blackberrys actuales no son aceptables para tu madre es posible que la próxima lo sea”.
Dejando de lado la anécdota, lo cierto es que el fabricante ya está trabajando en una nueva versión de Storm que intentará aprovechar la buena acogida del dispositivo en el mercado doméstico, “un gran mercado de consumo sin explotar”, según Jim Balsillie. Sólo el tiempo dirá si este nuevo smartphone estará ideado o no también para adolescentes, unos consumidores cada vez más activos y exigentes en el mundo de las TIC.