Ballmer: “Windows 7 y Windows Server 2008 R2 serán de vital importancia en el actual entorno económico”
La crisis económica ha provocado el recorte de los costes de las TI. Como consecuencia de ello, los de Redmond han llevado a cabo una campaña de recortes de precios y promociones a través de minoristas asociados, tratando de despertar el interés en Windows 7.
Steve Ballmer, CEO de Microsoft, ha utilizado un evento en San Francisco para hablar de la llamada nueva eficiencia que los administradores TI deben adoptar en un entorno económico difícil.
Al mismo tiempo, aprovechó para promocionar el ahorro de costes que proporcionan los nuevos productos de la compañía como Windows 7 y Server 8 R2.
“Estamos atravesando por un periodo caracterizado por una nueva eficiencia. ¿Qué queremos decir con eso? Las mismas presiones que han estado presentes durantes años ahora vienen acompañadas por un ansia para ejecutar un coste efectivo de las compras TI”, explica Ballmer.
Por supuesto, el CEO de los de Redmond utilizó el acto para asegurar que la adopción de Windows 7 y otras herramientas de software de la compañía allanará el camino a muchas compañías.
“En el nuevo panorama económico que se avecina la clave reside en hacer más con menos. Sin embargo, existe, al mismo tiempo, demasiada presión para desarrollar nuevas aplicaciones”.
Ballmer intentó llamar la atención de los asistentes sobre la necesidad de centrar su atención en el equilibrio coste-eficiencia a partir de la actualización de los productos de Microsoft. “Algunos de nuestros clientes deberían abrazar las actualizaciones de nuestros productos. Sólo así conseguirán un ahorro de costes efectivo”.
Llamando la atención sobre el desarrollo de Windows 7, Server 2008 R2 y Exchange Server 2010, Ballmer dejó claro que quiere ver a su compañía como parte importante de este proceso.
“La nueva eficiencia no sólo ayudará a las empresas a responder a la realidad económica de hoy sino que contribuirá a sentar las bases de los sistemas y las soluciones que conecten a las personas, la información y las aplicaciones de múltiples maneras”.
La brutalidad de los dos años de recesión ha frenado considerablemente los costes de las empresas TI y, por extensión, de Microsoft. Durante el cuarto trimestre del año, la compañía presentó un descenso del 17%, con ganancias que se situaron mil millones de dólares por debajo de las previsiones de Wall Street.
Como consecuencia de ello, los de Redmond han llevado a cabo una campaña de recortes de precios y promociones a través de minoristas asociados, tratando de despertar el interés en el próximo sistema operativo de la compañía.
Dicho esto, cabe destacar que una parte clave de su estrategia se centra en la empresa. La compañía pretende que Windows 7 sea aceptado por los profesionales de TI, algunos de los cuales pueden optar por quedarse con XP.
De este modo, Microsoft ha tomado medidas tales como ofrecer 7 Enterprise en una edición gratuita de prueba de 90 días.
A pesar de todo, la pregunta sigue siendo la misma: ¿se acogerán los profesionales TI a la rápida actualización de sus productos de software, teniendo en cuenta la comprensión de presupuestos existente en la actualidad?
Un informe de Deutsche Bank consideró que Windows 7 obligará a las empresas y a las pymes a actualizar sus sistemas, mientras que otro de ScriptLogic aseguraba lo contrario.