Amazon Web Services (AWS) y Red Hat han colaborado para poner en el mercado un servicio gestionado que permitirá a clientes de Red Hat OpenShift trabajar con aplicaciones contenerizadas en la nube de Amazon.
Se trata de Red Hat OpenShift Service en AWS, abreviado como ROSA, que ofrece un desarrollo simplificado de clústeres de Kubernetes sin necesidad de relacionarse manualmente con la infraestructura subyacente. Los clientes podrán crear clústeres con las API y herramientas de Red Hat OpenShift y acceder a todos los servicios de AWS.
“Cada vez más, los clientes están recurriendo a los contenedores para mejorar la velocidad y la portabilidad de las aplicaciones, y cada vez confían más en tecnologías como Red Hat OpenShift y AWS que facilitan el despliegue de aplicaciones contenerizadas”, comenta Bob Wise, GM Kubernetes en AWS.
“ROSA ofrece a estos clientes la posibilidad de ejecutar contenedores sin contratiempos en AWS utilizando las conocidas APIs y herramientas de Red Hat OpenShift”, confirma, “e integra toda la amplitud y profundidad de los servicios de AWS para crear, escalar y gestionar sus cargas de trabajo”.
AWS y Red Hat permitirán pagar sólo por los clústeres de contenedores y los nodos usados. ROSA promete precios flexibles y ofrece una opción de prepago de Red Hat OpenShift a través de una nueva suscripción de Red Hat.
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