Australia presiona a Google: borra la información privada de Street View
Las autoridades del país consideran que retener información privada de los usuarios puede suponer un riesgo.
Hace ya dos años desde que la recolección de información privada a través de redes Wi-Fi dirigía todas las miradas a Google. Usuarios y Gobiernos abrieron entonces procesos legales contra la herramienta de los de Mountain View.
El problema era la privacidad de los datos. Los coches de Google habrían acumulado información privada a través de las redes Wi-Fi abiertas que se encontraban dentro del itinerario. En agosto de 2010 eran 28 los casos legales que tenía abiertos el gigante de Silicon Valley.
Dos años después de esto y cinco desde el lanzamiento del servicio, el tema sigue dando de qué hablar. La noticia más reciente es la relativa a una multa que Estados Unidos interpuso a Google por bloquear una investigación relativa al caso Street View. La compañía no tardó entonces de enviar un comunicado en el que subrayaba sus buenas intenciones y su colaboración con la Comisión Federal de Comunicaciones estadounidense, que aún hoy investiga el caso.
Rodaba entonces la primera cabeza, la de Marius Milner, responsable de la tecnología que recopilaba datos y que, como revelara Google, incluyó el código para recopilar datos sin cifrar.
A raíz de la avalancha de demandas en 2010 la recopilación de datos privados terminó. Aunque relativamente. Aún hoy Google recopila fragmentos de información. Y es este el punto que ilustra precisamente la petición que la Comisión de Privacidad de Australia hace a Google.
El órgano considera que no borrar la información obtenida podría convertirse en un riesgo para los individuos y pide amablemente a los de Mountain View que la destruya, como recoge The Next Web.