AT&T se prepara para la suspensión de la compra de T-Mobile
AT&T ve cada vez más difícil la posibilidad de adquirir T-Mobile. El operador estadounidense ha dejado caer que podría asumir un cargo de 4.000 millones de dólares (algunas fuentes hablan de 6.000) si el negocio fracasara, algo que en la medida que pasan los meses parece más probable.
Las empresas involucradas han retirado también una solicitud de aprobación ante uno de los reguladores. Esto podría suponer un claro síntoma de que el acuerdo está muy lejos de llevarse a cabo; así lo creen los analistas, aunque desde las compañías mantienen que hay posibilidades de cierre, como han asegurado a través de un comunicado, recoge Reuters.
La solicitud de aprobación presentada ante la Comisión Federal de Comunicaciones ha sido pues retirada, ya que a pesar de que aprobara la operación, no tendría valor si el Departamento de Justicia la bloqueara después. Las compañías aseguran que lo han hecho para centrar los esfuerzos en obtener una aprobación por parte del Departamento de Justicia, cuya respuesta podría ser determinante.
De aprobarse, la adquisición convertiría a AT&T en la segunda compañía de telefonía móvil más importante del país. Los contrarios al acuerdo aseguran que de producirse, aumentarían los precios para consumidores y empresas, se reducirían los puestos de trabajo significativamente y se mermaría la competencia en el sector.