No me extrañaría que a los ingenieros de Honda se les ocurriera dar esta cualidad a su Asimo después de una visita a España. Bien es sabido que para poder intervenir en una conversación de grupo cualquier español de pro tiene que ser capaz de comprender lo dicen varias personas simultáneamente y además atacar con su propia línea de diálogo. Pues bien, Asimo es un poco más humano, un poco más español, si quieres, gracias a un conjunto de 8 mircófonos, 8, que le permiten identificar y comprender tres voces al mismo tiempo. Su software de reconocimiento, HARK, puede procesar los comandos con entre un 70 y un 80 por ciento de fiabilidad y los micrófonos están diseminados por toda la cabeza y el cuerpo de Asimo para reconocer las voces, vengan de donde vengan. No es tan espectacular como la capacidad de dirigir una orquesta, pero podemos encuadrarlo en el grupo de habilidades sociales. — Rafa M. Claudín [New Scientist]
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