Así funciona el estabilizador de imagen de Olympus

Ya no te podrán decir aquello de “tienes un pulso como para llevarte a robar panderetas”, al menos si te haces con una de las nuevas cámaras Olympus OM-D E-M5 II que gracias a su nuevo y complejo sistema de estabilización de imagen por compensación mecánica son capaces de contrarrestar casi cualquier movimiento de tus pecadoras manos consiguiendo que la fotografía que obtengas no sea un borrón vergonzoso.

En el siguiente vídeo puedes comprobar como, gracias al sencillo método de enfrentar la nueva Olympus (sin el objetivo) a otra cámaras, sujetas ambas de forma solidaria por sus respectivos trípodes, cualquier movimiento que la mano del fotógrafo imprime a la cámaras queda inmediatamente compensado

El resultado: una imagen estable en condiciones que para cualquier otra cámara serían inconcebibles e incompatibles con un resultado medianamente aceptable sin recurrir a altas velocidades de exposición, no siempre factibles o recomendables.

Incluso los pulsos más firmes, los brazos más resistentes y las manos más expertas tienen algú momento de flaqueza en el que el pulso tiembla, pero incluso si todas estas circunstancias se superan aún nos puede quedar una ráfaga de viento, por ejemplo, o un pequeño empujón. El sistema de Olympus sería capaz de contrarrestar buena parte de estos inconvenientes.

El responsable es un sensor de movimientos que ajusta de manera inmediata la posición del sensor de imagen acorde al desplazamiento detectado, corrigiendo con su compensación movimientos y tembleques varios. Dado que el sensor y el mecanismo de compensación están ubicados en el cuerpo de la cámara, y no en la lente (como en otros casos) se garantiza un correcto funcionamiento con todo tipo de ópticas.

vINQulo

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