Aruba ha hecho público el estudio “Beyond Connectivity” en el que se desvela que uno de cada cuatro (25%) de los líderes empresariales admite tener solo una comprensión funcional o limitada de la red empresarial, lo que se traduce en una desconexión potencialmente peligrosa para las iniciativas de transformación digital.
En el estudio, el 81% de los líderes empresariales afirmó que su organización necesita altos niveles de transformación digital e innovación para tener éxito en los próximos 12 meses. Sin embargo, solo un tercio (32%) espera alcanzar una transformación significativa. La presión para digitalizarse es alta, con el 93 % de los encuestados afirmando que su empresa le exige más a la tecnología después de la pandemia. Además, el 68% espera que las TI ofrezcan más información sobre los datos.
Como resultado, no es sorprendente que el 73% de los líderes empresariales consultados estén preocupados por la capacidad de su organización para mantenerse al día con los últimos requisitos tecnológicos y digitales. La encuesta, que recopiló las respuestas de 200 directivos de empresas internacionales, examinó las áreas en las que la red puede responder a estas demandas y evaluó el conocimiento de este hecho fuera de la cúpula de dirección de las TI de cada organización.
Los líderes empresariales concuerdan en que la tecnología y los avances en digitalización son ahora esenciales para que los empleados puedan realizar su trabajo (71%). Sin embargo, a pesar de su papel en la conexión de estos empleados con la tecnología que necesitan, solo el 61% de los encuestados afirma comprender plenamente la relación entre la productividad de sus trabajadores y la red.
Además, el 53% afirma no entender del todo cómo la red puede ayudar a impulsar la innovación, a pesar de que el 50% cree que el acceso a los datos es fundamental para desbloquear nuevas fuentes de ingresos en los próximos 12 meses.
La desconexión entre la comprensión de los líderes empresariales sobre la importancia de la infraestructura de red y su inversión en ella podría tener graves consecuencias. Mientras el 50% planea aumentar el gasto en iniciativas digitales en 2023, solo el 25% invertirá en infraestructura de red.
A pesar de que el 59% de los encuestados informó que sus empleados experimentan problemas semanales de conectividad en el lugar de trabajo, solo el 29% de los líderes empresariales cree que su organización es capaz de ofrecer una conectividad sin fisuras y solo el 21% está totalmente de acuerdo en que su organización dispone de la flexibilidad necesaria. Es peligroso permitir que las redes languidezcan y no se modernicen, lo que podría poner en riesgo la productividad y el éxito de la organización.
Larry Lunetta, vicepresidente de Marketing de Cartera de Soluciones de Aruba, ha afirmado: “En respuesta a la presión ejercida desde todos los frentes, este año las organizaciones en todo el mundo tienen grandes planes para su transformación digital. Las compañías quieren aumentar la productividad de sus empleados a través del trabajo híbrido, ofrecer un mejor análisis de datos para descubrir nuevas fuentes de ingresos, desbloquear la eficiencia operativa para ahorrar costes, reducir su consumo de energía para ser más sostenibles y mucho más. Y saben que deben seguir invirtiendo en tecnología para conseguirlo”.
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