Según reveló ayer un informe de Nikkei, Apple seguirá empleando pantallas con tecnología LCD en el iPhone.
En concreto, lo hará en un modelo que tendrá un tamaño de 6,1 pulgadas y se espera que tenga un coste inferior al del sucesor del iPhone X, debido al hecho de optar por pantalla de cristal líquido.
Además, se ha desvelado que es probable que ese móvil con LCD venga con una carcasa trasera de metal similar a la que llevan el iPhone 7 y el iPhone 7 Plus, y se pueda comprar en varios colores.
Asimismo, se ha precisado que la citada carcasa metálica será producida por Casetek, una filial del fabricante taiwanés Pegatron, que actualmente se encarga de las pantallas LCD que lleva el iPad.
En ese sentido, se especula con que será la propia Casetek la que producirá las pantallas LCD del futuro iPhone de 6,1 pulgadas.
A la vista de todo lo anterior, parece que Apple reservará las pantallas OLED para sus modelos estrella de mayor precio.
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