Apple ha anunciado hoy que el pasado mes de agosto realizó una adquisición en un campo por el que no había apostado hasta la fecha.
En concreto, la empresa californiana compró Faceshift, una compañía de Zúrich que está especializada en el campo del software que captura movimientos y ha colaborado con la última película de la saga Star Wars.
La empresa suiza fue fundada por un grupo de investigadores, y ha desarrollado tecnología de escáner facial que permite crear avatares y otras figuras, y logra captar las expresiones faciales de la persona en tiempo real.
El precio de la operación se ha mantenido en secreto, y se desconoce por completo para que desea Apple emplear Faceshift, aunque se especula con la posibilidad de que introduzca una funcionalidad para crear avatares en sus dispositivos móviles.
En ese sentido, desde Apple han indicado que ocasionalmente compran otras empresas y en la mayoría de los casos no suelen revelar datos sobre el propósito o planes detrás de esas operaciones.
Por otra parte, en TechCrunch señalan que tras la compra varios empleados de Faceshift han pasado a trabajar para Apple fuera de Europa.
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