Con sólo unos meses de andadura, la pequeña empresa AmieStreet ha llamado la atención de Amazon por su original sistema de descarga musical. A diferencia de los modelos de precio único de iTunes, AmieStreet permite a los músicos colgar sus canciones con un precio variable. Así una canción nueva costará cero céntimos. Conforme los usuarios empiezan a descargarla, la canción va subiendo de precio, hasta un máximo de 98 céntimos.
“La idea de dar al cliente la influencia directa sobre el precio de las canciones es verdaderamente novedosa”, explica Jeff Blackburn, vicepresidente de desarrollo en Amazon.
Los términos de la inversión no han sido revelados. Amazon ya comentó en primavera que quería abrir una tienda musical en línea a finales de este año. Además ha anunciado que venderá música de una gran discográfica del grupo EMI y de otras discográficas independientes.
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