La Administración Pública redujo un 20% su inversión TIC en 2020
A pesar del impulso de la digitalización al que ha obligado la pandemia, la inversión TIC de la Administración Pública se redujo en 2020, lastrada por la caída del gasto en comunicaciones, servicios y software.
La pandemia, con el confinamiento, los cierres perimetrales y las limitaciones a la movilidad, han supuesto la transformación digital de muchas de nuestras tareas cotidianas.
La relación con las Administraciones Públicas (AA.PP.) es una de ellas. La mayoría de los trámites que los ciudadanos hacíamos habitualmente en las oficinas de atención al público pasaron a hacerse de forma telemática. A la par, los empleados del sector público, como el resto de trabajadores, se vieron forzados al teletrabajo.
A priori, esta situación haría pensar que la inversión TIC de las Administraciones Públicas se dispararía. Sin embargo, la realidad es bien distinta. Según los datos del ‘Barómetro Inversión TIC de las AA.PP. en España’, elaborado por Adjudicaciones y Licitaciones TIC, la inversión global en 2020 se quedó en 2.701,39 millones de euros, lo que supone un descenso del 20% respecto a los 3.375,29 millones registrados un año antes.
Este retroceso de la inversión total contrasta con el crecimiento de la partida destinada a hardware, que fue la única categoría que aumentó en 2020. Impulsadas por la implantación del teletrabajo, las AA.PP. gastaron 700,95 millones de euros en hardware, un 65,05% más que en 2019, cuando se invirtieron 424,68 millones.
La cifra destinada a PC de sobremesa, portátiles y tablets se duplicó, hasta alcanzar los 217,90 millones. También creció significativamente la inversión en servidores y almacenamiento (+56%), situándose en 288,13 millones. Por el contrario, disminuyó el gasto en impresoras, equipos multifunción y escáneres (-13,7%).
Aunque el trabajo en remoto impulsó la inversión en hardware, no fue capaz de compensar el descenso en las partidas destinadas a servicios, comunicaciones y software. Así pues, el pasado ejercicio se invirtieron cerca de 400 millones menos en servicios. Esta partida supuso un gasto de 1.365,12 millones, un 22,1% menos que en 2019, cuando se invirtieron 1.752,67 millones. No obstante, hay subcategorías que sí que crecieron, como los servicios de outsourcing (+32% interanual). Sin embargo, cayeron significativamente tanto el gasto en mantenimiento (-39%) como en el desarrollo de software (-33,8%).
También fue importante el retroceso de la inversión en comunicaciones, que se redujo a menos de la mitad que en el año anterior, quedándose en 300,46 millones frente a los 651,61 millones de 2019 (-53,89%). El motivo principal es la reducción del gasto en servicios de telecomunicaciones, puesto que se invirtieron 400 millones menos que en 2019. En el último ejercicio, se destinaron 107,6 millones de euros a tal fin, mientras que un año antes se invirtieron 537 millones, por lo que en 2020 se registró un descenso del 80%.
En el caso del software, la caída fue menos acusada. Concretamente, se redujo un 10,7%, registrándose una inversión de 334,41 millones, frente a los 374,62 millones de 2019. El descenso en esta categoría se vio atenuado por el aumento del gasto en software de gestión (+16,5%), que alcanzó los 98,27 millones en 2020, destacando especialmente la inversión en ERP (30,6 millones), en gestión de documental y proyectos de digitalización (12,95 millones), y en business intelligence (10,01 millones).