Las últimas actualizaciones de Windows dominan uno de cada diez ordenadores mundiales

Las versiones Windows 8.1 y 8 para escritorio han logrado aumentar su cuota de mercado en el último mes hasta en un 10%, mientras la versión 7 sigue siendo líder absoluta.

Las versiones más recientes de Windows están comenzando a ganar terreno en los ordenadores de sobremesa de todo el mundo. Según un estudio elaborado por Net Applications sobre las cuotas de mercado para sistemas operativos de PCs, las versiones Windows 8 y 8.1 han logrado durante el último mes aumentar su presencia en más del 10% de los equipos informáticos mundiales. Así, ambas plataformas consiguieron cerrar diciembre con una cuota del 6,89% y 3,60%, respectivamente, lo que significa que uno de cada diez ordenadores vendidos en todo el mundo tienen estos sistemas operativos instalados.

El estudio publicado por la web Techcrunch, sugiere que mientras en las participaciones globales Windows y Mac del 90,88% y el 7,56% de noviembre al 90,73% y el 7,54% de finales de diciembre. Por su parte, Linux ha conseguido mejorar un poco recuperando lo perdido el mes anterior, llegando al 1,73% de presencia en los escritorios. En lo que respecta a las últimas actualizaciones de Windows, la versión 8 y la 8.1, han logrado superar la representación conjunta del 10%, de modo que la primera aportar un 6,89%, mientras que al segunda logra un 3,6%, lo que sumando ambos sistemas operativos alcanzan esta cifra de representación de tendencia al alza.

Por su parte, la anterior versión del sistema operativo, Windows 7, consigue el liderazgo absoluto con una participación del 47,52% de la tarta, lo que le sitúa en la cabeza de la clasificación a nivel mundial. En cuanto a Windows XP, a pesar de tener sus horas contadas, aún está presente en el 28,98% de los equipos. Por su parte, Windows Vista sólo ha logrado gobernar en el 3,61% de los ordenadores, a pesar de ser más joven.

Los resultados aportados por el estudio resaltan la presencia cada vez mayor de las nuevas actualizaciones de Windows en ordenadores de sobremesa, mientras que los modelos anteriores pierden fuelle y limitan su participación en este sector del mercado.