Activision es demandada por dos de sus antiguos desarrolladores por el impago de royalties

La desarrolladora de videojuegos Activision Blizzard ha sido demandada por dos de sus antiguos ejecutivos y desarrolladores, creadores de varios juegos de éxito.

Jason West y Vince Zampella, quienes eran los máximos responsables de su estudio Infinity Ward, han emprendido acciones legales contra la casa por el impago de royalties y el incumplimiento de los derechos contractuales en relación a la franquicia Modern Warfare2 y el control de la marca Call of Duty. Los desarrolladores exigen una cantidad de 36 millones de dólares (unos 26 millones de euros) a su antigua empresa.

Semanas antes Activision había contratado a unos abogados para realizar una investigación sobre ambos ejecutivos con el objetivo de intentar demostrar su “insubordinación e incumplimiento del deber fiduciario”. El resultado fue su despido, sin pagarles las regalías que les debía, según reza la demanda. De hecho, West y Zampella definen esta investigación como un “pretexto” para echarles a la calle, ahorrándose el pago de los derechos de estos juegos.

Según informaciones de Bloomberg, en la actualidad Activision obtiene la mayoría de sus ingresos gracias al éxito de sus tres títulos punteros: Call of Duty, Guitar Hero y World of Warcraft.