A fondo: Las tecnologías cerebro-ordenador y otras innovaciones que cambiarán nuestras vidas
Conexiones 5G, materiales avanzados, tecnologías cuánticas… son varias las innovaciones con potencial para transformar el mundo tal y como lo conocemos.
El Future Industry Congress ha vuelto a Barcelona para celebrar una nueva edición, la segunda de su historia, en la que ha habido tiempo para hablar de transformación digital, así como de tecnología 5G, de materiales avanzados, de tecnologías cuánticas y de las denominadas human brain technologies. Esto es, las tecnologías cerebro-ordenador. Todas ellos son avances disruptivos que están demostrando tener potencial para cambiar el estado de las cosas en los próximos años.
De hecho, son tecnologías de vanguardia que la propia “Comisión Europea ha fijado como prioritarias, con una inversión en investigación de 10.000 millones de euros en la próxima década”, como apunta Xavier Torra, presidente de Eurecat.
El evento organizado por el centro tecnológico que dirige Torra ha aportado unas cuantas reflexiones interesantes. Por ejemplo, en relación a las tecnologías cerebro-ordenador, el director de la unidad de eHealth de Eurecat, Felipe Miralles, ha desvelado que su mercado en Europa se multiplicará por diez antes del año 2025. “Hoy en día las tecnologías cerebro-ordenador impactan en un colectivo muy concreto, que son los grandes discapacitados”, dice este doctor en Ingeniería y Tecnologías Avanzada, pero “en 2025 estaremos hablando de millones de usuarios, en vez de miles, porque estas tecnologías incorporarán en el tratamiento de discapacidades leves, enfermedades neurodegenerativas y en la rehabilitación motora y cognitiva general, así como a los videojuegos o la educación”.
Desde tratamientos y fomento de hábitos saludables a actividades lúdicas, sus capacidades de mejora están ahí. Son reales. Hoy en día ya se están realizando proyectos como BACKHOME o INNOBRAIN para facilitar la vida de quienes han sufrido un ictus mediante la lectura de los impulsos de su cerebro y para rehabilitación cognitiva.
En la misma ponencia sobre tecnologías cerebro-ordenador, el químico e investigador sénior de la Unidad de Nutrición y Salud de Eurecat, Josep Maria del Bas, profundizó en cómo actuar sobre los circuitos neuroendocrinos del cerebro a través de la comida. Ciertos ingredientes son capaces de “modular las transmisiones neuronales y tratar trastornos como la depresión o la ansiedad”. Dado que “la alimentación puede determinar los ciclos internos de nuestro metabolismo”, añade Del Bas, “esto nos puede ayudar a tratar patologías como la obesidad”.
Conocer el cerebro más a fondo tendrá implicaciones en la medicina, en el entretenimiento, en la ingeniería, en la robótica… incluso a nivel empresarial. En este sentido, Miquel Montero de Quadras, CEO y fundador de Atomian, recuerda que “la computación cognitiva representa un nuevo paradigma: personas hablando con máquinas en el lenguaje de las personas” y anima a “desarrollar nuevas técnicas para analizar y gestionar de manera inteligente la gran cantidad de datos que se generan” en un momento en el que los dispositivos conectados no dejan de crecer. Esencialmente se trata de extraer conocimiento. Teniendo en cuenta sus ventajas, parece inevitable un futuro en el que seres humanos y máquinas convivan, y “en el que éstas tendrán derechos, obligaciones y hasta cotizarán a la seguridad social”.
La computación cuántica y la electrónica impresa
También cabe destacar intervenciones como la del responsable de la Unidad de Impresión Funcional y Dispositivos Integrados de Eurecat, Paul Lacharmoise, que asegura que la electrónica impresa es “una tecnología que cambiará la forma en cómo usamos la electrónica” al “integrarla en diferentes superficies”. Será posible “sensorizar objetos con un gran potencial en el ámbito de la internet de las cosas” e imprimir circuitos “suficientemente elásticos para colocarse sobre la piel”.
Por su parte, el especialista en ciberseguridad y miembro de la Quantum World Association, Ramsés Gallego, explicó en el Future Industry Congress que “ya hay empresas que hablan de ataques poscuánticos, cuando aún nos estamos preguntando si hay ordenadores cuánticos”. Unos ordenadores que, de acuerdo con el investigador en el Instituto de Computación Cuántica de la Universidad de Waterloo, Pol Forn-Díaz, nos llevarán hacia “réplicas exactas de proteínas con un centenar de bits cuánticos”, abriendo una “revolución en el ámbito de la investigación científica”.
¿Y el 5G? “Será una realidad a partir de 2020”, en base a las opiniones de Ana Pérez-Neira, coordinadora científica del Centro de Telecomunicaciones de Cataluña, trayendo un “reto tecnológico y un cambio de modelo de negocio. Habrá capacidad de compartir frecuencias entre operadoras, que podrán colaborar para ofrecer servicios de más calidad”. La contribución desde España ya se deja notar en este espacio, dado que “más de la mitad de proyectos europeos de investigación en 5G tienen presencia catalana”, de acuerdo con el director de SmartCatalonia, Daniel Marco.