Tras un largo tiempo de caídas, parecía que el mercado de ordenadores comenzaba a recuperarse el año pasado. Durante los meses de abril, mayo y junio de 2018, los envíos de estos equipos amenazados por la popularidad de dispositivos móviles pero cada vez más potentes crecieron un 2,7 % interanual, volviendo a los niveles de seis años atrás. Pero luego, durante el último trimestre del año, sufrieron la peor caída que se había registrado desde el tercer trimestre de 2016. Y el 2019 comenzó también en retroceso.
Los vaivenes siguen, ya que con los datos preliminares de IDC y Gartner para el segundo trimestre de 2019 sobre la mesa, lo que se aprecia es una recuperación.
IDC, que tiene en cuenta tanto a los ordenadores de escritorio y las estaciones de trabajo como a los equipos portátiles, dice que se han enviado 64,9 millones de unidades durante este último trimestre. Esto significa que el mercado de ordenadores tradicionales ha conseguido crecer un 4,7 %, que además es más de lo esperado. Los cálculos de Gartner, que no incluye dispositivos como los Chromebooks, son un poco más discretos, pero igualmente positivos. En su caso esta consultora destaca que el mercado de PC mejoró un 1,5 % tras dos trimestres en declive hasta los 63 millones de unidades.
¿Qué se esconde detrás de esta mejoría? Habría varias razones. Para empezar, se han suavizado los problemas de suministro. “Hay indicios de que la escasez de CPUs de Intel está disminuyendo, lo que ha sido un impacto continuo en el mercado durante los últimos 18 meses”, destaca Mikako Kitagawa, analista principal sénior de Gartner. “El suministro para procesadores Intel mejoró notablemente durante el trimestre, lo que permitió a la mayoría de los vendedores de PC cumplir con pedidos antiguos y al mismo tiempo enviar un buen suministro de nuevos PC a los canales”, explica también Jitesh Ubrani, director de investigación para Mobile Device Trackers en IDC.
“Además”, sigue Ubrani, “la amenaza de mayores aranceles llevó a algunos fabricantes de PC a enviar un excedente de ordenadores de escritorio y portátiles, sosteniendo por tanto artificialmente el mercado de PC durante el segundo trimestre”. Y es que la delicada relación entre Estados Unidos y China mantiene muy atentos a los analistas. El posible cambio arancelario está haciendo reaccionar ya a los fabricantes y no se sabe todavía cómo acabará afectando exactamente a más largo plazo. “Si bien la guerra comercial entre Estados Unidos y China no afectó al mercado de PC en el segundo trimestre de 2019, la próxima fase de aranceles podría tener un impacto significativo”, aventura Mikako Kitagawa. “La mayoría de los portátiles y las tabletas se fabrican actualmente en China”, desarrolla, “y las ventas de estos dispositivos en los Estados Unidos podrían enfrentar aumentos significativos de precio si se imponen aranceles punitivos y los proveedores no responden con medidas rápidas”.
Pero hay más motivos detrás de estos cambios en el comportamiento del mercado de PC. Entre ellos, “la demanda de la actualización de Windows 10 en el mercado empresarial“, apunta el propio Kitagawa. En esto coincide Linn Huang, vicepresidente de investigación para dispositivos y pantallas de IDC, que recuerda que “el mercado ha entrado en el último tramo de migraciones comerciales de Windows 7 a Windows 10”. Aunque Huang ve “poco probable” que se iguale “el pico observado cuando Windows XP” dejó de tener soporte, sí cree que “las organizaciones que buscan terminar su migración crearán nuevas oportunidades para el mercado en los próximos trimestres”.
Un claro reflejo de esto es lo que está sucediendo en la región EMEA (Europa, Oriente Medio y África), que también ha regresado a la senda del crecimiento durante el segundo cuarto del año. Aquí los consumidores no encuentran muchos alicientes más allá de los dispositivos enfocados a juegos o los PC móviles, pero los negocios sí están reaccionando. La demanda comercial se muestra fuerte a medida que el fin de soporte de Windows 7, fijado para enero de 2020, se aproxima.
Lenovo, HP Inc. y Dell, por este orden, son hoy en día las tres marcas más populares en cuestión de ordenadores. Entre las tres atesoran un 64,1 % de los envíos, según Gartner. Lenovo destaca por ser la que más rápido crece. A este trío le siguen en el top 5 una Acer que no consigue mejorar sus números del año pasado más Apple, según IDC, o Apple y Microsoft, según Gartner, que para hacer su clasificación añade los equipos ultramóviles premium tipo Surface.
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