8 consejos para teletrabajar sin perjudicar la seguridad de la empresa
El trabajo en remoto es una de las medidas recomendadas para limitar el riesgo de contagio por coronavirus.
La crisis sanitaria desatada por el COVID-19 o coronavirus ha obligado a empresas y autoridades a tomar medidas de contención como el teletrabajo.
Al trabajar desde casa, los empleados protegen su salud porque se reduce el riesgo de contagio. Y, al mismo tiempo, se mantiene la actividad del negocio.
Pero no todos los profesionales están acostumbrados a trabajar en remoto y quizás no sepan cómo hacerlo con eficiencia y, además, de manera segura, sin poner en peligro a la empresa y los datos confidenciales a los que tienen acceso.
Entelgy Innotec Security, la división de ciberseguridad de Entelgy, ha publicado una lista con ocho recomendaciones básicas para implementar el teletrabajo con seguridad:
- “A ser posible, utiliza los equipos de tu empresa”. Es decir, mejor si se evita el uso de dispositivos personales. Quien trabaje en la oficina con un ordenador portátil y tenga la posibilidad de llevárselo a casa debería hacerlo, ya que el propio ordenador contará con ciertas medidas de protección básicas.
- Lo mejor es conectarse con una red privada virtual. Pero, “si no dispones de una VPN a la que conectarte desde casa, es decir, una red privada virtual que permita recibir y enviar datos de forma segura, evita el uso de redes wifi públicas o de terceros”, dicen desde Entelgy. Y habría que revisar la configuración de la red doméstica para evitar problemas.
- “Extrema aún más tu precaución frente al phishing”. Como internautas hay que aprender a distinguir entre páginas web fiables y no fiables y entre mensajes con información segura e insegura. Esto significa, entre otras cosas, no pinchar en enlaces que aparecenen correos de dudosa procedencia ni descargar el contenido adjunto que llega en dichos emails.
- “Accede únicamente a sitios web que utilizan HTTPS”, porque son páginas que ofrecen una conexión segura, con un protocolo que garantiza la integridad de los datos y la confidencialidad de las comunicaciones.
- Al igual que cuando uno está en la oficina, “preocúpate por que todas las contraseñas que protegen el acceso a tus cuentas sean robustas, individuales y conocidas únicamente por ti”. Nada de usar secuencias fáciles de adivinar o que contengan datos personales, solo letras o una extensión demasiado corta.
- “Mantén todos los sistemas y aplicaciones actualizados”, tanto las puramente profesionales como las de nivel usuario, ya que pueden convertirse en puerta de entrada para los ciberdelincuentes.
- Del mismo modo, cuenta con las aplicaciones precisas. “Dispón de un antivirus instalado en todos los equipos de trabajo”, capaces de reconocer diferentes tipos de malware y de actuar contra las amenazas antes de que causen estragos.
- Por último, ten siempre un plan B. “Realiza copias de seguridad de forma periódica para asegurar que la información no se pierda en caso de incidente”. Incluso en el peor de los escenarios, siempre tendrás la posibilidad de recuperar los datos, que son el sustento de las empresas.