La ingente cantidad de datos digitales que se está acumulando durante los últimos tiempos vuelve necesario ahondar en técnicas de Business Intelligence que permitan a las empresas sacar provecho de esa información, tomar mejores decisiones y ser más productivas.
1. “Interacción humana e informática“, esto es, hay que construir dispositivos y programas en función de “la forma natural” en que las personas los usan. Y es que, tal y como señala QlikTech, “los usuarios no quieren ver los datos sólo en reportes estáticos sino que quieren sentir los datos e interactuar con ellos”.
2. “Desarrollando y acelerando el boom de los datos“. Si el número de información disponible crece, también deben aumentar los métodos disponibles para su análisis. Esto implica desarrollar soluciones lo suficientemente inteligentes como para manejar información procedente de varias fuentes de forma eficaz.
3. “Aumento de la liberación de la información“. Además de las soluciones impuestas por la dirección, en las compañías debería haber margen para crear modelos personalizados de análisis. Algo que permitiría explotar las posibilidades de incorporar a las plantillas a una nueva generación de trabajadores nacidos en plena era digital, según los expertos.
4. “La evolución y elevación del rol de IT“. A partir de ahora, los jefes de información o CIOs deberían dejar de ser meros “suministradores” de información para convertirse en “habilitadores” de la misma, facilitando la innovación y sirviéndose de planes de trabajo bastante más intuitivos que repercutan positivamente en las tareas de los demás.
5. “Diferenciarse a través de la explotación de la información“. La información ya es el máximo valor que tiene toda empresa y lo único que le permite alejarse de la competencia a ojos del consumidor, por lo que es un activo que se debe proteger, mimar y exprimir para sacarle todo ese jugo que encierra en su interior.
6. “Necesidad de velocidad y agilidad“. Tener los datos y, aparte, tener los datos que son correctos es fundamental. Pero más importante aún es conseguirlos con celeridad para poner negocios en práctica cuanto antes, satisfacer las necesidades de los clientes y adelantarse a cualquier otro rival.
7. “Transformación de los análisis“: La palabra análisis en el futuro tomará una acepción diferente, que irá más allá del mero resumen de algo que ya ha sucedido para materializarse en una monitorización continua de trazos del presente “que aparentemente no tenían relación” y permiten “predecir lo que va a venir”.
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