5 consejos para que tu presentación impresione a los inversores

Pocas cosas hay más intimidantes que presentarse ante un grupo de inversores. Por muy buena que sea tu empresas, hay demasiadas variables que pueden dar al traste con la ansiada inversión: competencia, escaso interés del capitalista, falta de oportunidad de mercado, etc. De hecho, las estadísticas de Forbes señalan que los fondos de capital riesgo rechazan el 99% de las ofertas que escuchan. Aunque no garantiza nada, una buena presentación es una forma de hacer ver al inversor el valor de la empresa en sólo unos minutos, aumentando así nuestras posibilidades. Los creadores del software de presentaciones Prezi han preparado estos 5 consejos para ello:

1. Define tu público objetivo. Ten en cuenta que los capitalistas de riesgo son muy diferentes de los clientes potenciales: están más precupados por la optimización de sus carteras, la inversión en equipos de alto potencial y entrar en nuevas oportunidades de mercado. Así que ocupate de conocer la firma de VC concreta con la que quieres llegar a un acuerdo: lee su blog, analiza su historial de inversión y aprende cuáles son sus objetivos.

2. Se visual y ahorra tiempo. Cuando sólo se dispone de 10 minutos para impresionar a un potencial inversor, no se puede pasar todo el tiempo aclarando cuestiones confusas. Utiliza elementos visuales, al estilo de una infografía, como iconos y flechas, para ilustrar analogías o conceptos abstractos y las relaciones entre ellos. Algo que llevaría 60 segundos explicar verbalmente puede ser transmitido en unos pocos segundos con las imágenes adecuadas.

3. Comienza con una frase fuerte. No importa lo complicado que pueda ser tu producto, es necesario simplificar el mensaje. El objetivo final es desarrollar una frase que puedas utilizar para llevar al inversor a tu terreno y que responda a las preguntas: quién eres, cuál es tu producto y por qué es útil.

4. Enfocarse bien a la forma de tu producto. Los capitalistas quieren estar seguros de que tu compañía va a despegar. Para garantizar este resultado cuando estás aún en una etapa temprana, necesitas demostrar tu adaptación al mercado dejando claro el problema que resuelve y los motivos por los que tu empresa está en la mejor posición para hacerlo. Todo lo demás es sólo pelusa.

5. No te olvides del factor personal. El equipo humano es uno de los elementos claves de una empresa. Su historia es tan importante como su producto y sus clientes, así que no olvides mencionar los detalles que te llevaron a donde estás.

Vía TNW.