4 consejos para pymes que estén pensando registrar sus patentes o marcas

En España existen 11.200 empresas que se califican a sí mismas como ‘innovadoras’, pero solo existen 3.600 patentes registradas. No es que las compañías nacionales no innoven, sino que sus tecnologías o inventos no se acaban registrando bien por pereza, ignorancia o por el alto número de investigaciones redundantes. La situación económica tampoco favorece la I+D, con la retirada de importantes ayudas a la investigación.

Estas son algunas de las principales conclusiones extraídas del debate ‘Patentes y Marcas: Una inversión imprescindible para la Pyme’ celebrado ayer en el Congreso ePyme de Fundetec. La mesa redonda contó con la participación de Alejandro Klecher, director general de Clarke, Modet & Cº, Francisco José Moreno, responsable de Dirección General de Industria y de la Pyme del Ministerio de Industria, Celia Sánchez-Ramos, investigadora de la UCM y fundadora de Alta Eficacia Tecnológica y Ramón Lois, director de Propiedad Industrial de Televés.

De la charla hemos podido extraer cinco consejos para las pymes innovadoras:

1- Registrar es poseer- “Si no registramos no somos propietarios de nuestros conocimientos. Sin saber medir el valor de nuestros conocimientos, tampoco valemos nuestra contabilidad”, asegura Klecher. El responsable de Clarke y Modet comenta que la valoración de muchas empresas es mucho más alta por los activos intangibles que poseen que por los materiales, como la propiedad industrial, sin embargo, estos no cuentan si no pertenecen legítimamente a una organización.

2- Registrar en España es lo primero- Una de las preguntas más frecuentes que se hacen las pymes nacionales innovadoras es si es mejor registrar una patente en España o hacerlo en otros países, si la intención es enfocarse en mercados de ultramar. El responsable de Industria recomienda el registro local en primer lugar, porque es rápido y barato: “Registrar una patente o marca en España cuesta poco más de 100 euros y tienes 12 meses para pensar si quieres solicitar también en el extranjero”. Para Sánchez-Ramos, nombrada mejor inventora del mundo por la ONU en 2009, “se debe fabricar pensando en exportar a distintos países del extranjero, pero no olvidarse de España. La Oficina de Patentes y Marcas supone una ayuda muy valiosa para todos los trámites que necesitemos”, asegura Sánchez-Ramos.

3- Cultura de empresa- De poco sirve tener empleados innovadores sí las altas esferas de una compañía no entienden el valor de la I+D. “La propiedad industrial de tiene que estar metida en todos los escalafones de la organización, por supuesto, incluyendo la gerencia y la dirección general”. Los directivos de una compañía deben ser conscientes de la importancia que la innovación y su registro puede tener para una empresa como ventajas competitivas frente a sus rivales, pero también para su crecimiento y evolución.

4- Aprovechar las licencias- Los expertos en propiedad industrial recomiendan a las pymes que no sean propietarias de sus patentes porque “les van a freír a pleitos” y que busquen distribuidores y licenciatarios. “Ese es el gran negocio de empresas tecnológicas como Microsoft, Intel, etc. Tú estás sentado tranquilamente y sigues innovando, mientras otros comercializan y extienden tu tecnología”, señala Klecker.