Las 3 mejores prácticas para proteger datos en la nube
Desde Veeam nos revelan cuáles son las 3 prácticas para proteger datos en la nube a nivel empresarial.
La “Global DataSphere” está experimentando un crecimiento exponencial en tamaño y se espera que la cantidad de datos en el mundo se duplique de nuevo para 2026, según IDC. Aunque la mayoría de las empresas ya han digitalizado sus operaciones, continúan añadiendo cargas de trabajo estratégicas y generando cada vez más datos. Esto ha provocado que la cantidad de datos que deben manejar las empresas aumente rápidamente, por lo que la adopción de una estrategia bien elaborada de nube ofrece ventajas importantes, como escalabilidad, flexibilidad y almacenamiento rentable.
¿Pero es este crecimiento sostenible a largo plazo? Según Gartner, se espera que el gasto total de los usuarios finales en servicios de nube pública alcance un récord de 592.000 millones de dólares en 2023, un aumento del 21% respecto al año anterior. Aunque esta rápida migración y crecimiento ofrecen oportunidades empresariales, también plantean preocupaciones de seguridad, especialmente cuando las migraciones “lift and shift” no siguen las mejores prácticas para la protección de datos moderna. De hecho, según la Cloud Security Alliance (CSA), el 96% de las empresas no tienen suficiente seguridad para proteger sus datos confidenciales en la nube. Por lo tanto, es evidente que queda mucho por hacer en términos de seguridad en la nube. Aquí presentamos las tres mejores prácticas para proteger los datos en la nube.
En este contexto, Rick Vanover, director senior de estrategia de producto de Veeam, nos ha querido dejar las 3 mejores prácticas para proteger los datos empresariales que estén alojados en la nube:
Las 3 mejores prácticas para proteger datos en la nube
1 – Conocer los datos
Para solucionar cualquier problema, el primer paso es identificar el problema. En el caso de proteger datos en la nube, es importante saber quién tiene acceso a qué y dónde se almacenan los datos. A menudo, los equipos de IT deben investigar y recopilar información sobre las cuentas y los costos de la nube en toda la organización. Una vez que se sabe lo que se almacena en la nube, es importante clasificar los datos según su importancia y sensibilidad. Los motores automatizados pueden ayudar con esta tarea.
Las empresas suelen almacenar grandes cantidades de datos en la nube, y es importante saber exactamente lo que se tiene para poder protegerlo. A menudo, los equipos no han priorizado los procesos de seguridad y red necesarios al trasladar datos a la nube, lo que puede dejarlos vulnerables a ataques. Además, hay muchos tipos de servicios en la nube que deben ser protegidos y recuperados en caso de interrupciones o ataques, como el código en el almacenamiento en la nube, las aplicaciones que aprovechan otros servicios en la nube y las API proporcionadas en la nube.
2 – Responsabilidades
Un problema común en las empresas es la falta de comprensión sobre sus responsabilidades en cuanto a seguridad y protección de datos en la nube. El modelo de responsabilidad compartida, en el cual el proveedor y el cliente comparten responsabilidades en la seguridad de la nube, a menudo no está claro para las empresas. Muchas asumen que el proveedor es responsable de todo, cuando en realidad su responsabilidad se limita a la seguridad de la infraestructura y las instalaciones físicas. Por otro lado, la seguridad de los datos, aplicaciones y acceso al entorno es responsabilidad del cliente.
Para garantizar la seguridad de los datos críticos y sensibles almacenados en la nube, es importante que las empresas realicen copias de seguridad en varias ubicaciones y en diferentes soportes. La mejor práctica es tener al menos una copia fuera de las instalaciones, offline e inmutable. Además, es fundamental que las empresas controlen el acceso y los privilegios de los usuarios en la nube. El uso de una sola cuenta para realizar múltiples funciones o dar acceso a todos los usuarios al God Mode puede ser devastador en caso de una brecha de seguridad. La gestión de accesos e identidades en todas las cuentas y suscripciones es necesaria para poder eliminar rápidamente cualquier fallo de seguridad. Es esencial seguir el principio del mínimo privilegio, asegurándose de que los usuarios sólo tengan acceso a los recursos y entornos necesarios para su trabajo.
3 – Rentabilidad
Es probable que implementar los dos principios anteriores sea suficiente para proteger a la mayoría de las empresas. Sin embargo, para mantener la salud y rentabilidad a largo plazo del entorno en la nube, es importante contar con procesos de higiene de datos adecuados.
Es esencial tener un proceso de ciclo de vida de datos que permita colocarlos en la plataforma de almacenamiento adecuada en la nube durante todo su ciclo de vida. De lo contrario, el trabajo inicial será costoso e ineficaz con el tiempo, y se pagarán costos innecesarios para almacenar y proteger datos incorrectos. Los costos asociados con el almacenamiento de datos pueden variar, y debemos asegurarnos de hacerlo de manera eficiente.
Además de los costos de almacenamiento de datos, también existen costos asociados con la API, la transferencia de datos y otros factores. Es importante que las empresas tengan un “modelo económico de nube” establecido para evitar que los costos se acumulen y para que el gasto se ajuste a las expectativas.
A medida que la cantidad de datos almacenados por las empresas y el mundo continúe creciendo en los próximos cinco años, la nube será una parte vital de su gestión. Las empresas deben buscar formas de utilizar sus datos y generar valor para su negocio y sus clientes. Esto requerirá una refactorización para lograr una mayor agilidad, pero también significa que estarán preparados para cualquier cosa. La nube es dinámica y seguirá evolucionando, por lo que las mejores prácticas cambiarán. Si las empresas se centran en los datos ahora, tanto en la nube como en las instalaciones, estarán preparadas para lo que les depare el futuro.