12 años de Google: Las 10 lecciones que nos ha enseñado
Todo comenzó con un minimalista pero eficaz motor de búsqueda que pronto se convirtió en un referente, pero Google ha sabido diversificarse y acceder a otros mercados que, en condiciones normales, hubieran sido prohibitivos en la competitiva industria de TI.
Google acaba de cumplir 12 años entre nosotros, tiempo en el que ha pasado de ser una startup capaz de ofrecer un minimalista pero eficaz motor de búsqueda a un verdadero gigante de la industria tecnológica dentro del sector de Internet, pero también en otros mercados como el de software o la telefonía móvil, donde la compañía ha sabido hacerse un hueco en el mercado.
Pero esto no significa que todo lo que toca Google se convierte en oro o que todo lo que hace es bueno para los usuarios. De hecho, ese argumento de ‘No seas malvado’ (‘Don´t be evil’) en clara referencia a Microsoft parece haber fracasado durante los últimos años y, en cierta forma, la compañía ha perdido ese camino que inicialmente planteo.
Estas son algunas de las lecciones que Google nos ha enseñado durante estos últimos doce años.
1. Las búsquedas realmente funcionan
Cuando Google se introdujo en el negocio de las búsquedas el panorama era diferente de cómo es ahora. En ese momento estaba dominado por unas pocas empresas que entendían lo que había que hacer cuando se busca en la Web, pero no supieron cómo implementarlo. Google sí lo hizo y demostró que podía contar con la comunidad de usuarios para mejorar y añadir nuevas ideas, algo que rápidamente le llevó al estrellato.
2. La publicidad basada en Web es el futuro
Cuando Google decidió utilizar el modelo publicitario como fuente principal de ingresos, demostró al resto del mercado que la publicidad en Internet es el presente y el futuro y que no tiene porque ser muy intrusiva. A día de hoy cada vez más empresas invierten en publicidad online y le tienen que dar las gracias a Google por ello.
3. Las empresas pueden diversificarse
Durante un tiempo, las empresas relacionadas con Internet buscaban centrarse en una sola cosa para hacerla bien, para ser buenos en un negocio concreto. Claros ejemplos de ello son el de eBay (subastas) o Amazon (venta de productos). Sin embargo, Google ha demostrado que la diversificación también puede ser positiva. De las búsquedas pasó a la publicidad y de ahí a los servicios cloud o la telefonía móvil. Y todos estos negocios parecen ir viento en popa.
4. Ser el “chico bueno” no dura toda la vida
Desde sus comienzos, Google se ha considerado como el “chico bueno de la película”, entre otras cosas porque la gran mayoría de sus servicios son gratuitos para los usuarios y porque desde el principio se ha mantenido como “la empresa que lucha contra de Microsoft y su modelo de negocio”. Pero los recientes problemas relacionados con la privacidad, Street View o el fracaso de Google Buzz demuestran que cuanto más grande es una compañía, más difícil es mantener a todos los usuarios felices.
5. El tamaño sí importa
Google es una empresa enorme y lo está aprovechando para mantener controlados a otros competidores. De hecho, es tal su influencia que en el momento en que ve alguna pequeña empresa que tiene potencial y puede competir contra ella en algún frente, simplemente la adquiere. Esta estrategia le ha ido muy bien durante los últimos años y es más que probable que la siga llevando a cabo. Sin embargo, este tipo de procesos también son perjudiciales para aquellas pequeñas compañías que buscan hacer historia, tal y como sucedió en su momento con la propia Google, algo que reduce la competencia por el libre mercado.