10 predicciones que marcarán la evolución de la inteligencia artificial
IDC contempla un cambio drástico en el gasto TI para los próximos años, con contribuciones de todas las industrias en IA.
La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en el fenómeno tecnológico de 2023 por derecho propio. OpenAI con su ChatGPT ha contribuido en buena parte a esta popularización, que seguirá extendiéndose durante los próximos años. Al menos así lo espera IDC.
Esta consultora pronostica que el gasto mundial en soluciones de IA superará los 500 000 millones de dólares en 2027.
“Todos los proveedores de TI incorporarán la IA en el núcleo de su negocio, invirtiendo dinero, capacidad intelectual y tiempo”, apunta Rick Villars, vicepresidente de grupo de Investigación Mundial de esta compañía.
“Para los CIO y los miembros de la C-Suite con conocimientos digitales”, tal y como señala Villars, esto supone “una gran cantidad de productos y servicios nuevos, innovadores y mejorados con IA”. Aunque también conlleva ciertos desafíos al amenazar con “inundar a los equipos de TI con muchas opciones ‘ahora con IA’ que aumentan los riesgos asociados a aumentos incontrolados de costes y pérdida de control de los datos”.
De cara a los próximos doce-veinticuatro meses, IDC confía en que habrá diez grandes sucesos dentro del ecosistema empresarial.
Para empezar, se producirá un cambio drástico en el gasto TI, que se orientará hacia la IA con rapidez y se dejará notar en todas las industrias.
En el caso concreto de la industria de TI, el impacto será mayor. Lo más probable es que la inteligencia artificial termine reemplazando a la nube como primer motor de innovación gracias a la introducción de nuevos productos y servicios, mejorados precisamente con IA.
Las ganas de invertir podrían verse afectadas por problemas de infraestructura. IDC deja caer que el ritmo de gasto en IA hasta 2025 podría ser mayor si no fuesen necesarios cambios importantes en la carga de trabajo y los recursos en los centros de datos y el cloud.
También hay que tener en cuenta el desajuste existente en cuanto a competencias tecnológicas. Esto lleva a los analistas a pronosticar que, hasta 2026, la falta de financiación en capacitación impedirá que un 65 % de las organizaciones exprima todo el valor de sus inversiones.
Parte de las inversiones irá destinada a los datos, un activo crucial para alimentar las aplicaciones de IA e incrementar la competitividad.
Otros escenarios que se plantea IDC son una transformación de la industria de servicios prestados por humanos, la apuesta por las soluciones de IA totalmente convergentes, un control unificado y una adopción acelerada de la IA generativa para optimizar casos de uso de edge computing con experiencias contextuales.
Además, la conectividad a internet basada en satélites extenderá la banda ancha y ayudará a cerrar la brecha digital con nuevas capacidades.