En Europa, sólo 1 de cada 3 páginas web públicas está adaptada al móvil
La “13ª medición de los indicadores de los servicios públicos digitales” también desvela que España es decimoquinta en términos de digitalización de la Administración.
Los resultados del “13th Benchmark Measurement of European eGovernment Services” (la “13ª medición de los indicadores de los servicios públicos digitales”), que han elaborado Capgemini, IDC y el Politecnico di Milano han sido publicados.
De este estudio se desprende que la digitalización de las Administraciones Públicas en Europa ha aumentado un 8 % en los últimos dos años. Actualmente el desarrollo medio sería del 61 %, en temas como la usabilidad de las herramientas públicas online, la transparencia en las operaciones, el nivel de control de los usuarios sobre sus propios datos o la existencia de servicios transfronterizos. Sin embargo, parece que esta digitalización no crece tan rápido como las demandas de los ciudadanos.
Sin ir más lejos, se sabe que sólo una minoría de las páginas web públicas de la región están adaptadas al móvil: 1 de cada 3. Y eso que el móvil se está convirtiendo en un compañero inseparable de la gente. Por ejemplo, en España 3 de cada 4 personas usarían el móvil para conectarse a internet. También se calcula que un 97 % de los europeos pueden acceder a internet a día de hoy. Y se sabe que la facilidad y rapidez de uso son tareas pendientes, o que cuanto menos no avanzan demasiado, a la hora de relacionarse con los servicios públicos.
Hay diferencias notables por países en lo que se refiere a la adopción de servicios digitales a nivel gubernamental. Aquellos que conforman la “Diagonal Digital”, esto es, Islandia, Noruega, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Estonia, Letonia, Lituania, Alemania, Austria, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo y Francia, tienen un rendimiento superior a la media. De los treinta y tres países que se analizan en el informe, España se encuentra en el puesto decimoquinto de digitalización de la Administración Pública. Aquí el nivel de desarrollo sería del 68 %.
“La perspectiva positiva de esta situación es que los países que forman la ‘Diagonal Digital’ están marcando la evolución de Europa y pueden servir de inspiración o modelo a los países que están más atrasados en su proceso de digitalización, para que mejoren la calidad y velocidad de sus servicios públicos online”, comenta Niels van der Linden, director de eGovernment Benchmark de Capgemini. “Sin embargo”, añade, “se debe evitar que este empuje se convierta en un arrastre, puesto que la distancia con los países rezagados crece más rápido de lo aceptable en el camino hacia el Mercado Único Digital”.
En Europa se ha detectado un avance en cuestiones como la disponibilidad de servicios de tipo financiero o de registros electrónicos, que tocan ciertas realidades como la recaudación de impuestos o las multas de tráfico que son importantes para los gobernantes. Pero habría cierta falta de innovación o transformación.
También cabe señalar que la obligatoriedad de los servicios online está más enfocada a empresas, o incluso estudiantes, que a los ciudadanos en general. De hecho, 1 de cada 5 habitantes europeos carecería de las habilidades digitales que se consideran necesarias.