La mayoría de los españoles se decantaría por la biometría como método de autenticación

Las contraseñas todavía perviven, pero en el futuro podrían acabar siendo sustituidas por otras fórmulas de autenticación, como la biometría o el reconocimiento de partes del cuerpo únicas como el iris del ojo o las huellas dactilares.

En España, por ejemplo, más de la mitad de los consumidores expresa ya su deseo de aprovechar la biometría. Lo hace un 51 %, según un estudio de Visa que también indica que tres cuartas partes de los españoles se sienten bien pagando con esta forma de identificación. De entre todas las posibilidades, la que más le gusta es la de escanear sus huellas. De hecho, el 84 % de la gente señala el escaneo dactilar como seguro, frente al 80 % que apunta al del iris o el 79 % que se decanta por las muestras instantáneas de ADN.

En cuanto a quién confiarían el uso de este tipo de datos de identidad, el 86 % nombra a los bancos, que se colocan en primera posición. Luego, un 79 % habla de diferentes sistemas de pago, un 73 % da su voto a centros comerciales y grandes superficies y un 71 % no tendría problema en interactuar de esta manera con “marcas online de reconocido prestigio”.

“Los bancos tienen una gran oportunidad en esta revolución en los pagos”, señala Carmen Alonso, directora general de Visa en España, a tenor de estos resultados.

“Desde las pruebas con reconocimiento de voz hasta algunos de los métodos biométricos anteriormente mencionados, estamos viendo que tanto los bancos como sus competidores, están dando pasos positivos para adoptar esta tecnología con gran variedad de usos”, indica. “Esta confianza del consumidor, tanto en la autenticación como en el almacenamiento de los datos biométricos, ofrece a los bancos un escenario perfecto tanto para los usuarios como para los propios bancos”.