¿Acabarán reemplazando los wearables a los smartphones? Parece que sí
Según un informe de Ericsson, no es descabellado pensar que en unos años se acaben usando incluso pastillas digeribles o chips subcutáneos para cuestiones de identificación y control.
¿Habrá un día en el que lo teléfonos no serán el dispositivo al que más apegados se sientan los usuarios? ¿Pueden los wearables superar a los smartphones en popularidad?
Aunque ahora mismo imaginar un mundo en el que los móviles no sean la opción número uno, el informe ConsumerLab “Tecnología wearable y el Internet de las Cosas” que ha elaborado Ericsson apunta a un reemplazo de los smartphones por parte de los wearables en cuestión de unos pocos años. De hecho, casi la mitad de las personas consultadas por esta compañía cree que, a partir de 2020, “los wearables podrían sustituir a los smartphones“.
Un tercio de la gente considera que esos dispositivos inteligentes para llevar puestos encima serán capaces de hacer prácticamente lo mismo que un smartphone en menos de cinco años. Y la misma cantidad se ve usando media decena de wearables conectados dentro de cuatro años.
A la hora de valorar sus posibilidades de uso, 6 de cada 10 trascienden la cuestión de la salud o el rastreo de la actividad. Valoran, por ejemplo, temas como la seguridad. Los wearables más deseados en estos momentos serían aquellos que se pueden usar como botón de pánico, seguidos de los relojes, los localizadores, los autentificadores de identidad y los purificadores de agua.
También cabe señalar que el 60 % de las personas prevén que en los próximos años será normal usar otro tipo de wearables, como pastillas digeribles o chips subcutáneos de cara a identificarse frente a los demás o controlar objetos.